LA PESCA


La pesca del sargo

En esta ocasión vamos a dedicar a hablar sobre la pesca a corcheo de sargos y mojarras, una modalidad y unos peces que atraen a miles de aficionados a toda la costa, pues deparan no sólo oportunidades de lograr grandes capturas, sobretodo en la costa norte de España, sino de pasar muy buenas jornadas de pesca con un gran número de picadas, pues tanto las mojarritas como los sargetes suelen responder muy bien al engodo del roquedo y a la acción de corcheo con caña de pulso sin carrete. Posiblemente sean estos los peces más buscados en las costas norteñas de España por pescadores de todas la edades, y más antes, cuando una gran mayoría salía de pesca casi exclusivamente con caña de corcheo, y frecuentaba prácticamente todo el año al espigón del puerto, los rompeolas de las playas y esas bellas puntas rocosas a modo de salientes naturales en numerosas calas.

  
Es más, aunque disfrutamos enormemente del deporte de la pesca y de estos peces con nuestros equipos de surfcasting en fondos de arena y mixtos, creo que tanto mojarras como sargos cumplen perfectamente con lo que el pescador a corcheo busca en sus excursiones de pesca. Añadiendo a todo esto a lo que yo denomino “meditación corchera”; nos mantenemos ensimismados mientras corcheamos que nos olvidamos por un buen rato de todo lo que rodea a nuestras vidas habitualmente, que no es poco con lo que está cayendo. Así que aquí van algunos trucos y recomendaciones por si te animas a sacar tu caña larga y a preparar unos cuantos aparejos, con tu cubo de engodo, tu cubo de capturas y tus cebos. Vamos allá!


En el Atlántico y el Mediterráneo es bastante común encontrar este escurridizo espárido llamado Sargo, muy codiciado por su sabor y lo entretenido que resulta pescarlo, hoy te mostraré algunos datos que te serán de gran utilidad para tener éxito en la pesca del Sargo.


El Sargo y sus características.- Su nombre científico es el Diplodus sargus sargus, y aunque popularmente lo llamamos Sargo o Mojarra, en algunas regiones también suelen confundirlo con la Chopa, ya que sus habilidades de camuflaje algunas veces le otorgan un color plateado y otras tornasol o marrón, pero para distinguir al verdadero, solo basta con mirar su dentadura, la cual posee incisivos delanteros y una doble hilera de molares, es muy conocido también por sus bandas oscuras en los costados que van desapareciendo con el tiempo. Cuando aún no son adultos se mantienen juntos en las orillas de la costa y pueden llegar a medir entre 10 y 15 cm, pero al llegar a la madurez crecen un poco alcanzando los 20 cm y es común que se alejen y naden de forma solitaria. Por otra parte, se sienten inseguros cuando el mar está calmado y hay luna llena, así que suelen buscar aguas turbias, inquietas y oscuras. Suelen ser golosos pero desconfiados, su dentadura poderosa le permite degustar casi cualquier cosa, sin embargo la mayoría prefiere los camarones, los crustáceos y otros moluscos pequeños.


Trucos de Pesca para Capturar Sargos.- Cómo hemos dicho en muchos de nuestros post anteriores, si queremos tener éxito en la pesca debemos entonces conocer a nuestra presa, en éste caso el Sargo es un cazador que espera pacientemente el momento propicio para conseguir una buena cantidad de alimento, valiéndose de su atributo más fuerte: El camuflaje.


¿Cuándo buscar el Sargo?.- Las aguas turbias color oscuro son sus favoritas, sobre todo si están agitadas y rompen en las piedras creando mucha espuma, pues así pasan desapercibidos para la avalancha de crustáceos y moluscos que se desprenden de las rocas, por la fuerza de la marea. Si vives en la costa y empiezas a escuchar el mar embravecido, el choque de los botes y el mal tiempo en el horizonte, entonces ya sabes que ha llegado el momento de sacar la caña y buscar Sargo, en primavera y verano es más difícil lograrlo, pero el otoño es el momento perfecto para encontrarlos.


Estado de la mar para la pesca del sargo y mojarras a corcho.- Realmente no hay que estar pensando en espumeros amplios en todo momento, porque esto no se da siempre en toda la costa; es cierto que la costa cantábrica y atlántica podemos encontrar espumeros con frecuencia, y en estos escenarios podremos lograr las mejores capturas, sin embargo en la costa mediterránea y atlántica andaluza estos espumeros son muy puntuales. Tanto mojarras como sargos están presentes en los roquedos de forma permanente, según las condiciones del momento, la claridad y el movimiento de la mar estarán más cerca de las rompientes o más en el fondo, incluso metidos en sus grietas y cuevas. No dudes en salir a corchear, pues merece la pena aunque la mar tenga poco movimiento, salvo en días de aguas excesivamente calmadas y tras varios días así, lo que sería el peor escenario.


Con un poco de espuma es como mejor se localizan los buenos puestos; busca una zona donde entren un poquito las olas, y fíjate bien en la configuración de las rocas del espigón, de los bloques; como ahora veremos hay signos que marcan si ese lugar tiene opciones o no de pescar buenos sargos y mojarras. Pero no renuncies a corchear por una mar calmada y transparente, si eliges bien el lugar y engodos con talento, la acción del reflujo o de una corriente de salida puede provocar que en un rato acudan un buen número de sargos o mojarras, seguramente no muy grandes, pero a veces son los “palmeros” los que dan más juego en esta pesca.


Elegir el mejor puesto de pesca para corchear con éxito.- Pescador con caña de corcheoSobre todo buscaremos zona donde podamos calar a buen fondo, que tengan alguna que otra roca a modo de saliente y donde observemos que hay entrada de agua con espuma y salida de la misma en otra dirección; es lo que se denominan las “coladas” Este movimiento de agua marca diferencias importantes para atraer a los peces a rebuscar comida allí, pero sobre todo para extender nuestro engodo de forma eficaz. Intenta no buscar puestos donde exista mucho fondo pero no puedas calcular qué hay bajo el agua; si es una poza muy honda sin más rocas ni movimiento de agua raro será que sea un puesto de pesca productivo salvo casos puntuales.


Igualmente debes dejar de insistir en esos puestos cómodos en los que todo el mundo pone su silla de la playa en la misma roca plana; esos puestos están muy rebuscados, te toca investigar y descubrir “tu” mejor puesto, que a veces está donde todos los demás pescadores renuncian a probar. Diría que lo fundamental es que entre mar y salga mar en una zona con rocas a varias profundidades alcanzables con tu aparejo; hay que buscar una zona en la que el mar entre un poquito y salga con fuerza esa misma agua, ahí rebusca seguro, ahí entran los peces a buscar comida, y ahí es donde mejor dinámica de pesca va a poder mantener nuestro aparejo de pesca, y donde mejor va actuar nuestro engodo. No te obsesiones por la profundidad, insisto, mejor que buscar zonas muy profundas es buscar zonas con alegría en el agua.


¿Desde dónde Capturarlo?.- El consenso general es situarse en diques y rompe olas, pues allí es donde más espuma se forma, sin embargo requiere de mucho esfuerzo instalarse bien en ellos, ya que las piedras resbalan y son muy peligrosas. La clave está en observar la zona desde un punto alto y divisar el mejor punto, los mejores son aquellos donde el agua esté revuelta y espumosa y que a su vez puedas ver bastantes crustáceos caminando por las rocas circundantes, pues si no hay alimento el sargo no estará rondando. Una vez que sepas donde te vas a situar, deberás trazar la ruta más segura para llegar a dicha zona, si está demasiado alta o quebradiza es preferible optar por una segunda opción a la que puedas acceder con mayor facilidad. De cualquier manera esto requiere de pericia y esfuerzo físico. Recomiendo que además del equipo de pesca, lleves ropa cómoda y un par de zapatos anti resbalantes para caminar por las rocas.


¿Cómo tentar al Sargo?.- Los veteranos se preparan con antelación para crear una pasta especial a base de pan duro, sardina y algunas veces sémola de trigo, algunos prefieren que la masilla quede seca y manejable y otros más dócil y quebradiza, la verdad es que depende del gusto de cada quien, ya que es el olor de la sardina lo que va a llamar la atención de los sargos hambrientos. Es importante saber que esta pasta no se utiliza como cebo en el anzuelo sino para atraer al banco de peces hacia la zona en donde estemos pescando, deberás lanzarla sobre las rocas para que el agua la esparza uniformemente, tal como lo hace con el alimento natural, por eso también tienes que tomar en cuenta la corriente, si al cebar el agua la marea lo empuja hacia otra zona, alimentaras gratis a todos los peces y tú te quedaras sin nada. Para no caer en dicho error, espera hasta que pesques tu primera presa y luego ceba mejor la zona donde lo encontraste, no desperdicies masilla si no estás teniendo suerte, es mejor probar una zona diferente.


La pesca del sargo y mojarras a fondo con caña en mano.- No basta con calar el aparejo en el fondo, eso es lo que hacemos en los comienzos, cuando parece que todo radica en poner el aparejo en el agua y esperar como hipnotizados a ver sí hay movimientos, ondas alrededor del corcho de pera pintado de color rojo, pero no, eso está bien para comenzar, pero cuando ya vas con otra intención, conociendo esta modalidad de pesca, descubres que no basta, que al aparejo hay que darle vidilla. Si queremos lograr buenas capturas de sargos y mojarras hay que procurar calar el aparejo de pesca con suavidad en una zona en la que sea el movimiento del agua el que se lleve el aparejo hacia el lugar donde calculamos que pueden estar comiendo los peces. Te aseguro que esta es la forma de subir de nivel, de ir avanzando y poniendo tu aparejo cada vez en mejor disposición de pesca en el lugar adecuado, así que olvida lo de calar justo encima de donde sabes que están o pueden estar los peces, no golpees más la superficie ahí, hay que valerse de la mar, cala unos metros separados, y deja que la corriente o la colada del puesto atraiga o mueva tu aparejo, así el cebo llegará a los peces de forma natural, como le llega la comida en esa zona, y entonces es cuando entran sin miramientos.


Para ello antes de pescar debes descubrir el movimiento del agua en ese puesto. En las corrientes de entrada y los reflujos está la diferencia entre capturar o no; ojo, que hay días que buscas el mejor puesto del mundo y los peces están con la boca cerrada, pero la pesca es así. Salvo circunstancias como estas, buscando con talento una zona en la que entra agua en forma de manga o con olas que rompan, pero que metan mucha masa de agua entre las rocas, podemos tener éxito. Esta entrada la denominamos corriente de entrada; mueve mucha agua ante la rompiente y hace que nuestro corcho suba y baje constantemente, lo que facilita que los peces, una vez engolosinados con el engodo, tomen el cebo cuando se va hacia arriba, provocando una picada instantánea; esta misma masa de agua que entra es la que sale al romper. Esta salida la denominamos reflujo, y nos permite tener calado para nuestro aparejo de entrada y de salida, pues en esta zona también se meten las mojarras y los sargos a buscar lo que el agua saca de las rocas. Será un punto fuerte para engodar, ya que una palada de engodo ahí se reparte a muchos metros de distancia, y los peces entran a contracorriente buscando el comedero.


Mejor material para pescar sargos y mojarras.- Flotador corcho pera pesca de sargos. Sedales de pesca finos si nos movemos en zonas donde lo habitual sean las capturas pequeñas o alguna mediana en cuanto a sargos o mojarras, lo habitual en la mayoría de pesqueros para corchear a pulso no necesitamos sedales gruesos, nos movemos por debajo del 0,30 y cerca del 0,20 mm de diámetro, según pesqueros y según el atrevimiento del pescador, pero es cierto que a mayor claridad del agua y mayor quietud menor debe ser el calibre de nuestro sedal. Corchos y flotadores hay para aburrir, desde lo más estilizados procedentes del diseño para la pesca en agua dulce hasta los más tradicionales boyas de tipo pera, siempre equilibrando el corcho con el plomo. Merece la pena dedicar un rato a calibrar correctamente, calculando el lastre ideal para cada corcho según la mar y el cebo que usemos, así podremos llevar preparados varios aparejos para ir cambiando según necesitemos. El anzuelo de pesca no puede ser pequeño por dos motivos, primero porque debe proporcionar un buen clavado en peces grandes, y segundo porque para pescar con masilla, que es lo habitual necesitamos un anzuelo de tamaño suficiente para que pueda sujetar bien la bolita de masilla. Entre el número 2 hasta el 6 hay donde elegir, según sean los peces habitualmente de nuestra zona, pero no te pases con anzuelos pequeños, dificultan el clavado y facilitan que se los traguen demasiado los peces más grandes.


Un toque o picada viene determinado por el tamaño del pez y por el momento; con aguas muy calmadas y poca actividad se sucederán los toques, pero pueden escasear las picadas directas, entre otros motivos porque las mojarritas que se acerquen suelen ser pequeñas y no pueden llevarse el cebo de un tirón. Ante esto hay quien se desespera y comete el error de poner los anzuelos más pequeños para aprovechar los pececillos que entran. Hay que enguadar a mayor distancia aprovechando la salida de los reflujos para intentar atraer mojarras y sargos de mayor tamaño. Pensemos que cuando hay muchos toques es que hay movimiento de pececillos, y esto atrae a peces más grandes. Enguademos, mantengamos el tamaño del cebo y esperemos acontecimientos. Si paran de golpe los toques atentos, porque puede ser que estas mojarritas se marchen porque entran peces mayores, o alguna lubina o baila, y sin buscarlo, lo mismo la recompensa es mayor.


El mejor cebo para pescar mojarras y sargos.- El secreto de esta técnica es el enguado, más allá de los cebos o del propio equipo, incluso que el puesto, podemos buscar un lugar bueno, ofrecer los mejores cebos, tener un equipo equilibrado y muy eficaz, y lógicamente podremos llegar a capturar peces, pero si enguadamos las posibilidades aumentan en tamaño y cantidad. Pero ojo, no todo radica en tirar pegotes de masilla al agua, para enguadar de forma efectiva hemos de basarnos en pastas muy líquidas y muy finas; lo que debemos conseguir es crear una estela que vaya desplazándose con la salida del reflujo o la salida del agua que entra a la rompiente, con ello podemos conseguir reclamar a las mojarras y sargos que están dispersos por la zona, o merodeando por el fondo. Para estos peces funcionan muy bien los enguados de calamar o pota, de marisco de la zona, de sardina y de aceites o pastas basadas en conservas. Se trata de conseguir una masilla muy triturada y diluir al punto exacto para que se reparta muy rápido y navegue con el reflujo, así los atrae y no consiguen comer, despertando más su interés por los cebos que van a encontrar, entre los que destaco por su probada eficacia la masilla de sardina, el camarón vivo o la tira pequeña de calamar.


¿Qué cebos utilizar?.- El sargo nunca le hará ascos a casi nada, pero al ser una criatura precavida, dudara de aquello que destaque demasiado y no esté acorde con lo que el mar le arroja naturalmente, por eso los profesionales suelen utilizar gambas, titas o quisquillas como cebo principal, eso sí, bien ensartados en el anzuelo para que no se desprendan con la fuerza del mar sobre las rocas. Si no cuentas con gambas ni camarones, vale utilizar ermitaños, cangrejos de playa, chipirones o incluso gusano corenano o de rosca. Por lo general quienes son profesionales en este terreno prefieren la pesca a boya, aunque también son muchos quienes lo hacen a Surfcasting, te explicaremos los trucos de cada una para que te sientas en libertad de escoger el método que mejor te funcione. Por lo general quienes son profesionales en este terreno prefieren la pesca a boya, aunque también son muchos quienes lo hacen a Surfcasting, te explicaremos los trucos de cada una para que te sientas en libertad de escoger el método que mejor te funcione.


Pesca de Sargo a Boya.- Con esta técnica y esta presa específica se recomienda que la pesca del sargo comience cuando la marea esté subiendo, por dos razones, la primera es que la mayoría de las veces (no siempre) los Sargos prefieren ir en busca de comida en las tardes, y la segunda es porque desde un acantilado es mucho más cómodo que el agua suba hacia nosotros, para poder manejar mejor la caña y la línea. El aparejo utilizado en esta técnica es bastante simple; se requiere una boya plomada cuyo peso dependerá del viento: A mayor velocidad y fuerza del mismo, más pesada la boya. Luego y justo debajo de la boya, un emerillón resistente. El bajo de línea deberá tener al menos dos metros de largo, o un par de metros más en caso de que el mar no esté demasiado revuelto, ten en cuenta que el sedal debe tener una buena calidad y un grosor que vaya desde 0,23 mm hasta 0,30 mm, como recomendación, te recomendamos estos hilos de flurocarbono invisibles bajo el agua. Por último, justo a un metro del anzuelo Asari Chinu Laser Carbón (medida 1 -1/10) puedes poner un plomo de perdigón para darle un poco más de profundidad.


Pesca de Sargo a Surfcasting.- Aunque no es muy común esta modalidad para el sargo, lo cierto es que con esta técnica podemos coger ejemplares de mayor tamaño, ya que se centra en capturar a los adultos que están solitarios alejados del rompiente. También es preferible el Surfcasting cuando no hay temporal y las aguas no se ven muy agitadas. El truco para tener éxito es cebar muy bien la zona, utilizando el mismo preparado de sardina pero con añadidos de cualquier otra clase, mientras más variado mejor, eso sí, para el cebo que se montará en el aparejo, deberás utilizar gambas o gusanos muy resistentes, pues la potencia del lance de estas cañas podría deshacer la carnada. Otro consejo es no intentar hacer dobletes o tripletes pues solo conseguirás que los sargos solitarios rehuyan de tu sospechoso aparejo.


Consejos Generales.- Paciencia, mucha paciencia e inteligencia, haz un sondeo general de la zona y prueba en distintos sitios para mejorar tu suerte. Ten confianza en lo que haces y utiliza materiales de buena calidad.
Sin más que agregar, te deseamos una ¡buena jornada!

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