La pesca deportiva reactiva el turismo en el Amazonas brasileño. - El estado de Amazonas, situado al oeste de la región Norte de Brasil, es uno de los principales destinos turísticos del país, con un valor especial para todo aquel que desee adentrarse en la inmensidad de la selva tropical. Además, el río y sus afluentes, que albergan una enorme diversidad de especies de fauna y flora tropical, constituyen un escenario ideal para la práctica de actividades como la pesca deportiva. En los últimos años, la pesca ha reforzado uno los atractivos turísticos más destacados de la región, alcanzando un crecimiento del 10%.
La temporada apta para la pesca, que se lleva a cabo de los meses de agosto a marzo del año (siendo variable en función de cada región del Amazonas), impacta positivamente para la economía de las ciudades ribereñas y garantiza empleo y renta para sus habitantes, que trabajan como guías y barqueros y brindan sus servicios a los turistas. Según la compañía estatal de turismo Amazonastur, se espera que los visitantes relacionados exclusivamente con la pesca inyecten algo más de 3 millones de euros en la economía local.
De acuerdo con el ministro de Turismo, Vinicius Lages, ‘el turismo ordenado y sostenible en la zona es una de las alternativas de desarrollo generador de renta más prometedoras para las poblaciones locales, debido al enorme potencial de la región’. Entre la variedad de especies que habitan las aguas amazónicas destacan el pez pavón (uno de los preferidos por los deportistas y que llega a pesar más de 10 kilos), el paiche, el pez arowana o el tararira. Además, al tratarse de una modalidad deportiva, los pescadores siempre devuelven el pez a su hábitat, por lo que el impacto natural es mínimo.
Las condiciones para la práctica de este deporte en el Amazonas son tan óptimas que, durante la próxima temporada, las estimaciones de Amazonastur son de recibir más de 9.700 turistas. De los extranjeros que llegan a sus aguas, el 95% proceden de Estados Unidos, donde la pesca deportiva es practicada por 37’4 millones de aficionados. Según USFishandWildlife, el gasto de sus compatriotas en viajes, equipos y licencias Service (agencia gubernamental americana responsable de velar por los peces y la vida silvestre) asciende a la cifra de 40 millones de euros, lo que da una idea aproximada del valor potencial de esta actividad.
La pesca deportiva en Brasil. - Brasil, con alrededor de 7’8 millones de aficionados, ejemplifica el desarrollo de la pesca deportiva, al alcanzar un crecimiento cercano al 100% respecto al año 2004, cuando el número de aficionados era de cuatro millones, según un estudio de la Asociación Nacional de Ecología y Pesca Deportiva, Anepe. Esta posición de referencia se debe en gran medida a la larga lista de municipios aptos para la pesca en la región ‘amazonense’, que asciende a 25.
Entre los principales destacan lugares como Autazes, Barcelos, Nova Olinda, Borba, Carreiro y Santa Izabel do Rio Negro, siendo los municipios que están a la orilla del Río Negro y Río Uatumã los más visitados por los turistas. Respecto al precio de los paquetes turísticos de pesca deportiva en el Amazonas, la mayoría suele variar desde los 1.000 hasta los 3.000 euros con alojamiento, con una estancia media de tres a siete días, lo que equivale sin duda a una experiencia asequible.
Un viaje para hacer una vez en la vida, combinando pesca deportiva de alto nivel en el entorno incomparable de la selva amazónica, navegando por el río Negro y visitando zonas completamente salvajes y vírgenes, con la seguridad y comodidad.
La provincia de Amazonas es la que registra el mayor movimiento de pescadores en Brasil. La oleada se inicia en junio o julio, cuando los ríos de la zona sur empiezan a bajar y el tucunaré, pez emblemático de esta región, vuelve al cauce y, por ende, se torna accesible a los artificiales. Hacia noviembre se abre un paréntesis, ya que las lluvias torrenciales hacen que estos ríos vuelvan a crecer, pero, pasadas las fiestas de fin de año, las cuencas del norte, dependientes del río Negro, otra vez convocan a miles de aficionados que buscan su gran trofeo, hasta mediados de marzo.
La abundante presencia de aguas en Pará es responsable de la formación de bellos rincones naturales. El estado también alberga los principales afluentes del Amazonas, como Tapajós, Xingu y Curuá en la margen derecha y Trombetas, Nhamundá, Maicuru y Jari en la margen izquierda. Sus principales ríos son: el río Amazonas, el río Tapajós, el río Tocantins, el río Xingu, el río Jari y el río Pará. Estos ríos son muy populares porque albergan una gran variedad de peces, así como excelentes lugares para la pesca deportiva. La gran pregunta es, ¿dónde pescar en el estado de Pará?
Río Tapajós (Santarém). - El río Tapajós baña la ciudad de Santarém y presenta una alta pesca con muchas especies de cuero y escamas como: jaús, perros y pavos reales, listos para ofrecer una experiencia de pesca inolvidable. El recorrido puede incluir la playa Alter do Chão, que fue votada como la playa de agua dulce más hermosa del mundo.
Rio Araguaia / Rio Tocantins. - El río Araguaia es uno de los ríos más pesqueros de Brasil, atraviesa una gran parte del Estado de Pará, proporcionando la captura de hermosos tucunares y jaús, teniendo como puntos de base de pesca el municipio de Conceição do Araguaia / PA, pasando por el pueblo de Itaipavas en Piçarra / PA, Marabá / PA y yendo a su desembocadura, el río Tocantins, donde forma el lago de la Hidroeléctrica Tucuruí. Se identifican alrededor de 300 especies de peces y se estima que la región recibe anualmente alrededor de 20 mil pescadores aficionados. Las principales especies deportivas capturadas son tucunares, pirarucus, arowanas, jaús, piraras, traíras, corvinas y piaus.
Isla Mexiana. - En la isla de Mexiana, en el archipiélago de Marajó, es posible pescar las escamas más grandes del mundo, el Pirarucu, un nombre dado por los indígenas Marajoaras que significa pira (pez) y annatto (rojo). En su época de reproducción, el macho de la especie adquiere un color rojo más acentuado, y esta especie puede alcanzar un promedio de 2.5 m de longitud y pesar 200 kg. Además de la pesca deportiva, es posible tener los campos de Marajoara como fondo, Los rebaños de los guarás, el búfalo, los caballos y el contacto directo con la cultura marajoara y sus costumbres, leyendas, bailes y gastronomía diferenciada.
Sitio de pesca estatal Volta Grande do Xingu. - El Sítio Pesqueiro tiene un área de 256.35 km², con tramos de cascadas, rápidos y rocas que impiden la navegación de pesca comercial y, por lo tanto, atrae la atención de los amantes de la pesca, ya que se considera un área llena de peces de las más variadas especies de la cuenca. Esta ubicación fue creada en 2005 por el Gobierno del Estado de Pará para ser un territorio especialmente protegido y hoy es el principal y más buscado lugar de pesca en el río Xingu, presentando alta pesca y poder capturar especies variadas, que van desde el bajo del pavo real, perros puntiagudos e incluso bagres grandes, como piraíba y jaú.
Río Iriri. - El río Iriri es el principal afluente del río Xingu, su fuente se encuentra en la Serra do Cachimbo y corre 800 km hasta la orilla izquierda del río Xingu. En el verano amazónico es posible notar la formación de pozos y lagunas que son excelentes para los pescadores, incluida la pesca con mosca. La temporada de pesca comienza en junio y se extiende hasta mediados de diciembre. Esta fecha se define en función de las lluvias en la región, cuando de junio a julio reinan las matrinxãs, bicudas, perros y todos los peces de cuero. Entre julio y mediados de noviembre es posible encontrar pavos reales y trairões.
Sitio de pesca de São Caetano de Odivelas. - En los ríos Jataí, Mujuim, Mocajuba, Pereru, entre otros, y en los majestuosos manglares de São Caetano, es posible encontrar especies que son el objetivo de las principales operaciones pesqueras, como la pesca del «rey del manglar», el camurim (lubina) y los conocidos «rey de la plata», la pirapema (sábalo), especie que atrae proporcionando al pescador mucha adrenalina, frente a la fuerza, la velocidad y el salto, aspectos que hacen que la pesca valga la pena. La temporada ocurre durante todo el año, preferiblemente en las lunas menguantes y menguantes.
Reserva Especial de Pesca Deportiva Rio Azul / Rio São Benedito. - Los ríos São Benedito y Azul, afluentes del río Telem Pires, forman parte de la primera área de conservación dedicada a la práctica de la pesca deportiva en el país. Creado en 2001, es un área preservada con otras de preservación ecológica que alberga manantiales, recursos forestales, minerales y reservas indígenas. Entre ellos se encuentran Serra do Cachimbo, el Parque Estatal Cristalino y la Reserva Indígena Kayabi. Además de la pesca deportiva, la región tiene una diversidad natural que cautiva a los visitantes, ya que la diversidad de especies de peces en la región es impresionante, y es posible capturar fuego tucunarés, trairões, perros, bicudas, cacharas, jundiás, jaús, jacundás, pirañas y las Impresionante pacu-goma.
El Río Azul. - El río Azul es un afluente del río São Benedito conocido por su gran diversidad de especies de peces y que a lo largo del año cambia sus características. En la temporada alta de lluvias, el río es voluminoso con sus aguas color té. En el punto álgido de la sequía, el río Azul se transforma, los rápidos se vuelven aún más desafiantes y el agua cristalina como un gigantesco acuario natural. Los meses de junio a septiembre marcan la estación seca en la región. Durante este período el río estará en su nivel más bajo. Con las aguas cristalinas es posible visualizar los cardúmenes sobre el fondo de arena y piedras. En este momento, los peces de escamas tienden a aparecer más, mientras que los bagres grandes estarán restringidos a los puntos más profundos.
Entre los meses de octubre y diciembre comienzan las lluvias, generalmente con chaparrones rápidos al final de la tarde. Con la lluvia el bosque cobra vida y pronto aparecen las flores y los frutos. Momento ideal para pescar "al vuelo" con cebos que imitan la caída o el aspecto de los frutos. Las matrinxãs, por ejemplo, son oportunistas y suelen concentrarse en grandes cardúmenes bajo un árbol frutal como el anacardo. En los siguientes meses, enero y febrero, las lluvias serán intensas. Golpes fuertes que duran horas. El nivel del río sube y las aguas entran en el bosque de ribera, especies como el trairão y el tucunaré visitan estos lugares. Las bicudas también tienden a acercarse al bosque cuando cazan. En el punto álgido de la inundación, el pez cuero se aventura a cruzar el río. De marzo a mayo son los últimos meses de la temporada de lluvias. Es una época muy propicia para pescar especies de escamas, en general los depredadores picudos y hembras son muy activos. Además de los jaús, pirararas y jundiás que se encontrarán en los puntos más profundos.
Río São Benedito. - El río São Benedito es un afluente del río Teles Pires, ubicado en el estado de Pará y forma parte de esta primera área de conservación dedicada a la pesca deportiva en el país, creada en 2001, que es la Reserva Especial de Pesca Deportiva Rio Azul/Rio. San Benito. El área preservada alberga manantiales, recursos forestales, minerales y reservas indígenas, incluida la Serra do Cachimbo, el Parque Estatal Cristalino y la Reserva Indígena Kayabi. Además de la pesca deportiva, la región cuenta con una diversidad natural que deleita a los visitantes y la diversidad de especies de peces de la región es impresionante, con hermosos ejemplares de pavón de fuego, trairões, cachorras, barracudas, cacharas, jundiás, jaús y la impresionante goma pacú Es un verdadero paraíso para los pescadores deportivos en medio de la selva amazónica. Navegar por estas aguas es como sumergirse en lo más profundo de la naturaleza, rodeado de la selva tropical más grande del planeta. Aguas cristalinas, cascadas, fauna y flora únicas en el mundo. Un lugar especial para pescar, soltar, observar, fotografiar e interactuar con la naturaleza.
Sitio de pesca de Cuianara / Vila de Cuianara. - La variedad de peces que se encuentra en las aguas de Cuiarana es una invitación para los entusiastas de la pesca deportiva a pescar Stonefish, Yellow Hake, Corvina, Robalo o Camurim y el «Tarpon» internacional, conocido en Pará como Pirapema. El pueblo de Cuiana en Salinópolis ofrece buenas condiciones de recepción, como empresas especializadas que ofrecen servicios y equipos para el pescador deportivo, además, el pueblo cuenta con pilotos, que son pescadores comunitarios que conocen los mejores tiempos de pesca y pesca.
Pesca del Pavón en el Amazonas Brasil. - El pavón, (peacock bass en inglés o tucunare en portugués) es uno de los peces de agua dulce más espectaculares de pescar. Algunos lo describen como un black bass dopado de hormonas. Sus embestidas son feroces y su pelea impresionante. Sin duda, no hay otro pez igual. Y seguramente no hay mejor sitio para pescarlos que en la cuenca del Río Negro en pleno corazón de la jungla amazona.
Se puede pescar el pavón con cañas de spinning o con mosca según su preferencia. Pescamos con streamers y poppers en aguas poca profundas de lagunas donde no existe pesca comercial. Generalmente es cerca de la superficie donde veremos el 80% de las picadas de los tucunare, muchas veces pescando a pez visto. Durante estas jornadas es común que un pescador saque de 20 a 40 pavones en un día incluyendo pavones mariposas de 2 a 3 kilos hasta los grandes pavones azules de entre 5 y 10 kilos.
El Pantanal de Brasil, un paraíso escondido de fauna salvaje. - El Pantanal, una de las mayores áreas inundadas del planeta, se abrió al turismo como una meca de la pesca, especialmente en esta área a lo largo del río Paraguay, en el municipio de Cáceres (centro oeste de Brasil). El festival internacional de pesca deportiva de Cáceres atrae cada junio a unas 250.000 personas y fue registrado en el libro Guinness como el mayor campeonato de pesca en aguas fluviales.
Pero al surgir las restricciones ambientales a la pesca predatoria, el turismo ha tomado una nueva dirección: la observación de la rica fauna salvaje, destinada a amantes de la naturaleza del mundo entero. Al final de los años noventa venían a pescar y se llevaban toneladas de peces. Hoy sólo está permitido un ejemplar por pescador. Llegamos a un pico y ahora estamos acabando con la depredación", explica a la AFP el secretario de Medio Ambiente de Cáceres, Jorge Amedi.
Ahora no pueden decir que hacemos turismo depredador, sólo pescamos una pequeña cuota, el resto los devolvemos al agua, es pesca deportiva, pero está bien, nos da más incentivo. Los más interesante es que cuando completas la cuota, puedes contratar un guía para conocer los animales y tener la suerte de toparse con un jaguar, el mayor felino de las Américas. Especialmente en la época seca, de julio a septiembre, el jaguar se acerca a veces al río para refrescarse o cazar. Su avistamiento es una lotería a la que muchos se arriesgan.
Anacondas y pirañas. - En el Pantanal pueden ser vistos con mucha facilidad un gran número de animales como la capibara -el mayor roedor del mundo-, caimanes, nutrias y un sinfín de aves, del guacamayo azul al negro tucán de pico naranja. Casi dos decenas de caimanes se amontonan al sol en una milimétrica franja de playa en la orilla del río, muchos con su feroz boca abierta. La barca llega casi a rozarlos, pero la mayoría permanece inmóvil, expuestos al sol de la tarde que mata las bacterias entre sus dientes.
Un poco más allá, un capibara traslada en su lomo a un pajarito sirirí, de tonos amarillos, que le come los insectos. También hay nutrias, insaciables devoradoras de peces que cazan con sus patas delanteras. "Hoy en el Pantanal hay más animales porque no se permite la caza", dice Merice Kunkel, una experimentada guía que organiza largos viajes en la zona. "Trabajo con europeos, vienen para ver animales. El que más éxito tiene es el jaguar, también la anaconda, y todos se impresionan con las pirañas", explica.
Aunque mucho menor que la Amazonia, el Pantanal ocupa una vasta área de 210.000 km2 (más de dos veces Portugal), la mayoría en Brasil y una parte menor en Bolivia y Paraguay. Pese a la ganadería, que tiene más de 200 años en la región, se considera que conserva buena parte de su vegetación.
La pesca del Tucunare. El tucunare, hábitat y morfología. - El tucunaré, también conocido como pavón y, en España, como Sargento, es un pez de alta voracidad procedente de los ríos de la zona amazónica y también de los lagos del lugar. Dividido en cinco subespecies diferentes (Cichla temensis, ocellaris, intermedia, orinocensis y monoculus), se caracteriza por tener un cuerpo con forma casi cilíndrica y comprimido en la zona que se acerca a la aleta dorsal. Sus tamaños pueden ir desde los 45 centímetros hasta los 100 y su peso de los 13 a los 15 kilogramos en estado salvaje. Destaca por su color amarillento en la parte central de su cuerpo, degradado a rojo en la parte inferior y a verde en la superior con unas franjas negras que lo atraviesan verticalmente.
Muy protector de su territorio, es conocido por su agresividad, ya que no duda en atacar incluso a señuelos que sean el doble de grandes que él. Su inteligencia también es uno de los factores que lo hacen famoso, es capaz de meter a las crías en su boca con tal de protegerlas de amenazas externas. En cuanto a su hábitat, el pez sargento se encuentra sobre todo en América del Sur y Centroamérica. Brasil, Bolivia, Venezuela, Colombia, Perú, Guayana, Ecuador y la Guinea Francesa son los países donde es más frecuente verlo surcando las aguas de los ríos. Generalmente, su ubicación está delimitada por todos aquellos lagos y ríos adscritos a la región del Amazonas. Aguas con un caudal considerable, a ser posible con más de 5 metros de profundidad, dado que le gusta moverse por zonas con un nivel de agua medio, aunque con poco movimiento.
En primer lugar, lo más importante a tener en cuenta es que hay épocas en las que este pez es mucho más fácil de ser avistado y capturado. Dado que el desove de su especie se realiza durante el verano, los meses de calor son los más recomendables para ir a por él bien preparado en cuanto a materiales, sea tanto por cebos como por cañas.
A la hora de buscarlo, es importante recordar que se encuentra en ríos y lagos con una profundidad aproximada de 5 metros. Al tucunaré le gustan las aguas con una profundidad considerable para moverse con libertad, como también le gustan aquellas que están tranquilas y mansas para no dificultar su nado. Por eso mismo, lo más recomendable a la hora de ir a por él es centrarse sobre todo en las zonas donde haya una gran cantidad de vegetación o incluso troncos sumergidos, ya que son los lugares donde suele esconderse.
Si muerde, hay que ser rápidos. La voracidad de este pez es más que famosa, como también la rapidez con la que es capaz de moverse. Sus dimensiones, si bien considerables para el agua en la que se mueve, no le impiden coger rápidamente el cebo y llevárselo mientras el pescador mira atónito. Por eso mismo, siempre alerta para tirar en el momento en el que se note que la criatura ha mordido. El resto es una batalla de aguante y fuerza, ya que estamos ante una pieza con una fuerte tirada, pero a la que es bueno dejar que oponga resistencia para que poco a poco se vaya cansando.
No trates de llevarla a tu posición rápidamente. Tira, para oponerte a su mordida, pero deja también que se aleje un poco para ir, después, recogiendo sedal lentamente hasta poder atraparlo por completo. Aunque hay que gastar especial cuidado, ya que, si puede, se adentrará en zonas repletas de vegetación y te hará imposible poder sacarlo de allí sin romper el anzuelo.
Mejores lugares y materiales para pescar el tucunare. - Toda el área amazónica es recomendable para encontrar a este pez. Los pescadores de Brasil, Bolivia, Venezuela, Colombia, Singapur, Ecuador, Panamá, Perú y Puerto Rico pueden encontrarlo por estanques, lagos, ríos y estuarios. Aunque varios de estos lugares se alejan del que fuera su auténtico hábitat natural, se introdujo como especie invasora con catastróficos resultados para los peces y la fauna general del lugar.
Entre sus alimentos favoritos se encuentran las crías de cualquier otra especie de pez, los camarones, los insectos, las lombrices; pero también las lagartijas, las ranas e incluso las iguanas. Debido a esto, es importante utilizar señuelos de superficie con unas dimensiones considerables, ya que no dudan en lanzarse a por ellos para intentar devorarlos. Las mejores carnadas a emplear para su captura son los spinners de color blanco, las plumillas también blancas y todo lo que sea brillante, ya que llama su atención.
Busca en zonas con aguas muy tranquilas, donde apenas haya movimiento y donde la vegetación se encuentre cerca. Si vas en verano, la mejor época para la pesca del tucunaré, es recomendable ojear sobre todo en sitios que estén cerca de troncos hundidos o parcialmente sumergidos, ya que este pez suele esconderse cerca de ellos para evitar cualquier posible amenaza.
Usar cañas de 1,80 metros aproximadamente es la mejor opción para estos peces, ya que es recomendable pescar a media distancia para evitar que estos vean a los pescadores. También, se recomienda utilizar líneas multifilamento y con una gran resistencia. Puede que el tucunarés no supere los 6 kilogramos; pero su fuerza vale por dos y es capaz de romper más de un hilo por no ir lo suficientemente preparado para oponerle resistencia.
No es demasiado grande, pero sí es bastante fuerte. Ten eso en cuenta, junto a su voracidad y peligro, a la hora de plantarle cara. Desconfiado, inteligente y con preferencia por irse a zonas profundas y repletas de obstáculos para romper la oportunidad de capturarlo. Busca llamar su atención con algo que brille para que vaya a por él y, después, aguanta todo lo posible para que se canse utilizando siempre líneas fuertes y cañas de una longitud considerable. Todos los factores cuentan para hacerse con esta pieza.
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