https://tintorero-wwwartesdepesca.blogspot.com/2013/06/vamos-pescar-trucha-de-mar-reo.html
Especie migradora anádroma. Conocido como "trucha de mar", es frecuente que muchos pescadores crean que trucha y reo sean dos especies diferentes, sin embargo la biología nos dice todo lo contrario y que el reo es una trucha común que migra al mar para alimentarse durante un tiempo y retornar al rio con la finalidad de reproducirse. Pez de talla media que no suele superar los 120 cm de longitud total y 30 Kg de peso, aunque en España raramente alcanza los 60 cm y 10 Kg de peso. Su morfología es muy variable, la cabeza es grande provista de dientes muy desarrollados que se extienden por los maxilares, premaxilares, dentarios, palatinos y vómer. Dos aletas dorsales, la primera con 10 a 15 radios ramificados y la segunda adiposa. Negro en la parte superior del cuerpo, generalmente anaranjada en los lados, rodeados por halos pálidos. La aleta adiposa tiene el margen rojo.
La fase de crecimiento del reo transcurre en el mar. Al alcanzar la madurez sexual, remontan los ríos y denotan una marcada tendencia a penetrar en los afluentes y arroyos. Nacen en el río y los juveniles bajan al mar después de dos o tres años de río. Reciben entonces el nombre de esguín y se tornan plateados perdiendo las pintas rojas para pasar desapercibidos en su nueva vida marina. Los ejemplares que consiguen llegar al mar no se alejan de las costas. Pueden trasladarse a muchos kilómetros de distancia o quedarse en los estuarios y rías de nuestra geografía y suelen volver al rio donde ha nacido, aunque no necesariamente. No se sabe a ciencia cierta porqué unas truchas emigran al mar y otras no, incluso parece que la condición sexual tiene alguna relación, ya que hay una media de un macho por cada tres hembras. Puede que en el mar, mas rico en nutrientes, les aporte a las hembras la suficiente cantidad de alimento para reproducirse. En este medio permanecerán entre uno y tres años para retornar al río y reproducirse.
La freza tiene lugar entre diciembre y febrero y la entrada varia en cada río pero suele producirse desde abril hasta finales de año. Los primeros en remontar al río son los de un solo año en el mar y los grandes acostumbran a entrar en verano y a principios de otoño. Los juveniles, en agua dulce, ocupan los mismos tipos de hábitat que los pintos de salmón aunque, cuando coinciden en simpatía ambas especies, el reo se instala en los tramos de granulometría más gruesa. Prefiere aguas frías, bien oxigenadas de la altiplanicie y las corrientes grandes en las áreas montañosas de fondos de rocosos, bancos socavados, y de abundante vegetación, y sus límites de tolerancia son más bajos que los de la trucha arco iris. Se alimenta de insectos acuáticos y terrestres, moluscos, crustáceos y peces. Madura a los 3-4 años y se reproduce en los ríos. Su vida y el comportamiento en la freza, es similar a los salmones. La hembra produce cerca de 10.000 huevos.
Su pesca.- Podemos aplicar las mismas técnicas utilizadas para la pesca de la trucha, con variantes en los tamaños y colores de los señuelos artificiales. La lombriz es el cebo natural más utilizado. Son estos meses de entrada cuando los pescadores intentamos engañarlos con diferentes artes, siendo para mi gusto la pesca a mosca seca la más espectacular. Las horas más propicias para pescarlo son el amanecer y el anochecer, momento en que la oscuridad se vuelve nuestra aliada, pues el reo es un pez tremendamente astuto y desconfiado y al menor signo de peligro buscara un cobijo. La lucha con este pez es impresionante, su fuerza y sobre todo su astucia para soltarse del anzuelo, realizando espectaculares saltos, hacen que sea tremendamente difícil llevarlo a la mano y por eso los aficionados a su pesca la denominamos "reomanía" y es que engancha, y mucho.
Formas y técnicas para la pesca del Reo.- El reo no deja de ser una trucha común que migra al mar como el salmón para luego regresar a los ríos para su desove. Con este comportamiento se consiguen características que hace a su pesca más atractiva, ya que alimentándose en el mar consigue unos tamaños y una fuerza que hace su pesca una bonita y corta experiencia, ya que apenas tenemos tres meses para practicarla.
Cómo se realiza la pesca del reo.- La pesca del reo es tan variada como la del salmón y la trucha. De hecho, en las comunidades autónomas donde se puede pescar (Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco) son en general los lugares donde la pesca de la trucha es menos restrictiva y por tanto se pueden usar de forma más general el uso de formas de pesca tradicional como la pesca con cebo vivo o cucharillas con triple anzuelo. Pero también en las zonas más restrictivas las oportunidades con distintas técnicas son enormes. Este es un pequeño resumen de cada una de ellas:
Pesca del reo con cebo vivo al tacto.- Más semejante al salmón que la trucha, tanto por necesitar cañas más fuertes como por los cebos. A los clásicos como la lombriz, la reina de todos ellos es la quisquilla. La forma de pescar si se parece algo más a la trucha que al salmón. A este último, se le suele identificar dentro de una poza en la que con el mayor sigilo presentaremos nuestro cebo natural. El reo es más abundante pero su identificación visual muchas veces es más compleja. Por ello debemos en bastantes ocasiones presentar el cebo natural “a ciegas” buscando los apostaderos donde creamos que este el reo. Los montajes son sencillos, líneas algo más plomadas que la trucha, ya que el reo estará en ríos con más fuerza en el que lanzaremos contra corriente buscando que vaya descendiendo rozando el fondo con el empuje del agua.
Spinning.- La toma y la lucha de un artificial por un reo es una enorme experiencia de pesca. La cucharilla es sin duda la reina de la pesca del reo con esta modalidad, especialmente con montajes plateados que asemejan no sólo pequeños peces sino que suelen ser los más apropiados en ríos que en mayo, junio o julio tienen una frondosa vegetación que limita el paso de la luz. Jugaremos con cucharillas medianas o medianas-grandes, como las del número 3, variando modelos ligeros con otros de mayor peso. Las pesadas de forma general a principio de temporada, cuando los ríos llevan más corriente y se necesita de este mayor peso para poder manejarlas. Las ligeras en las semanas finales, ya en pleno verano. No sólo la corriente es menor, sino que también crece la vegetación y la trucha se mueve más en superficie. Por las características de los ríos, también podemos optar por peces duros. El manejo de los minnow puede ser complicado en estos primeros días, salvo en tramos someros, pero en junio-julio se le puede sacar un gran rendimiento.
Pesca del reo a mosca.- Cada día crece en adeptos a pesar de las críticas –como también ocurre con el salmón y en menos medida la trucha- de los pescadores tradicionales. La combinación es perfecta, ya que al abrir la temporada tarde lo hace cuando comienzan las eclosiones masivas que no nos abandonan hasta el cierre de la misma. Con ello, las tomas de mosca por los reos son espectaculares tanto si usamos moscas tradicionales para la trucha como la wooly bugger, moscas de la piedra o pardones, como con montajes más parecidos al del salmón, moscas fantasías con las de tentar a los reos más grandes. Sea de una forma u otra se abre unas semanas apasionantes para los que puedan acercarse a los ríos de nuestras costas del norte de España.
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