LA PESCA DE LA LUBINA CON PEZ VIVO Y BOYA.-Esta técnica, que a mi parecer es muy simple, pero a la vez muy selectiva, y que nos puede dar grandes alegrías.
EQUIPO.-
- Caña.- ante todo ligera, ya que pasaremos largo rato con ella en la mano de un lado para otro. Con las medidas entramos en la amplitud de escenarios, hay que adaptarse, pero 4 metros , 4-50 podría ser una medida estándar, para poder trabajar las piezas, que normalmente suelen venir bien enganchadas.
- Carrete.-ligero también, bien compensado. Un 5000 o 6000 de Shimano
- Linea.- Mejor emplear trenzado de 20 lbs con bajo de una braza de monofilamento, que varía en grosor según el escenario, pero de buena calidad, y como media ronda los 0,30-0,35 mm de diámetro. Puede emplearse únicamente monofilamento sin ningún problema.
- Boya.- normalmente de pequeño porte(salvo que sea indispensable alcanzar un punto lejano), como las empleadas para el sargo, con el fin de darle la máxima libertad al pez vivo, que al fin y al cabo es el protagonista
- Anzuelo.- color oscuro, nada de plateados. De un tamaño adaptado al pez que empleemos. No demasiado grande, aproximadamente del que podríamos usar para encarnar un cangrejo
ANZUELADO.- Se pueden anzuelar los peces de diversas maneras, según el gusto personal o la consistencia de los mismos. Para mi, la mejor forma es pasándolo justo por delante de los ojos, o por la parte superior del lomo con mucho cuidado de no profundizar mucho. Otra opción es atarlo al anzuelo con hilo de seda, lo que a mi parecer resta movilidad, y empeora la presentación. El pez irá libre, sin plomos ni intermediarios entre el anzuelo y la boya, para una total libertad
PECES QUE EMPLEAREMOS.- Normalmente se suele utilizar peones, xureliños, lanzones, chicharros pequeños o muiles de pequeñas dimensiones. En invierno se utilizan mucho las angulas y pequeñas anguilas. Pueden servir otro tipo de peces, que la lubina no descartará cuando esté hambrienta como gobios, pequeñas mojarras, salpas, etc...Los mejores son los lanzones y los chicharros, que se consiguen más fácilmente. Los primeros son de muy buen gusto para las robalizas, pero muy delicados y se mueren con mayor facilidad. Los segundos son más resistentes más enérgicos, pero quizás menos apetecibles, con mayor cantidad de espinas. Los lanzones son ideales, en cuanto a consistencia, resistencia y aprecio por las lubinas, pero son más difíciles de conseguir.
MÉTODO DE CAPTURA DEL CEBO.- Es la parte más ardua del trabajo, si no existen bancos frecuentes en los puertos, o no tienes acceso a ningún barco pesquero que pueda facilitarte un puñado de peces. Se pueden capturar atrayéndolos con engodo de anchoa o de sardina, macizando poco a poco, normalmente en esquinas o cerca de luces en puertos o estuarios. Si se logra atraer a un número considerable de peces, disponiendo de una zaranda o un "medio mundo" de dimensiones considerables que previamente colocaríamos bajo el cardumen, de una sola tirada se puede sacar pez vivo de sobra para varias jornadas. Si no, se pueden capturar uno a uno, con anzuelos mínimos y trozos de sardina congelada, para que no se desprenda fácilmente del anzuelo
MANTENIMIENTO DEL CEBO VIVO.- Si no se dispone de un vivero, se puede utilizar un oxigenador que se encontrará con facilidad en cualquier tienda, con un par de pilas. Consumen bastante poco. Esto, junto con un caldero de unos cuantos litros de agua llegará para conservarlos de un día para otro. Una vez en el pesquero, se puede cambiar el agua de vez en cuando y sería suficiente. Si alguno de los peces se muere, retiradlo inmediatamente, pues les afecta al resto, y podrían llegar a morir por estrés.
LOS ESCENARIOS Y LAS CONDICIONES.- Para esta modalidad se pueden recorrer variedad de escenarios, pero con unos requisitos mínimos
Debe de haber suficiente agua, ideal en torno a 4 metros de profundidad. Poco viento, necesario para manejar la boya, sobre todo cuando la línea debe sortear rocas en la deriva de la boya
A poder ser se deben cumplir las condiciones óptimas como para el spinning: 1-2m de ola, amaneceres y atardeceres, días nublados. No se descarta la noche, también fructífera. Sería ideal además de estas condiciones, que existiese una corriente, que ayude a mover la boya en una dirección,tratando así de que el pez recorra el mayor espacio posible. No es condición indispensable, pero es muy a tener en cuenta. Partiendo de estos datos, distingo cuatro escenarios diferentes.
PUERTOS.- No es el mejor lugar teóricamente, pero nos puede deparar grandes sorpresas en forma de un buen robalo, o un banco de lubinas quileras. Aquí la mejor hora es una vez se ponga el sol, o en amanecidas, prospectando los lugares con luz artificial, donde se acumulará microfauna.
ROMPIENTES.- Cualquier rompiente, con una profundidad suficiente será ideal para esta pesca, buscando la lubina bajo la espuma, o en claros entre espumeros.
Piedras que dejen a la vista grandes laminarias son buenos indicadores.
En días de Otoño o Primavera, oscuros, se pueden hacer pescatas de esas que nunca se olvidan
RÍAS Y ESTEROS.- Sin duda, lugares a tener en cuenta, sobre todo cuando en mar abierto hay demasiado oleaje,y entra el pescado a comer. Se pueden utilizar espigones, o rocas que podamos andar a lo largo, ya que lanzaremos el pez relativamente cerca, 5-10 metros, con el fin de aprovechar las corrientes que desplazarán la boya en paralelo, y con ella se traslada el pez vivo y nosotros, recorriendo un mayor espacio. También se puede colocar la boya en otros lugares sin corrientes, como ensenadas, o pozos que creamos apropiados. Un ejemplo sería una playa de arena y piedras, mixta, con rocas a los márgenes cerca de un aporte de agua dulce. Prospectar estos lugares con angula viva en Invierno siempre es un acierto. Esta técnica, es a veces compatible con el spinning, pudiendo practicar ambas modalidades y disfrutar de un gran día de pesca, exprimiendo al máximo todos los recursos.
PESCA DE LA LUBINA EN PLAYA .-
Equipo. Para este tipo de pesca, utilizaremos cañas largas, de 6 a 7 metros, muy flexibles y con una acción que les permita lanzar un plomo de 60 a 80 gr, como mínimo. Como la lubina viene a comer al espumero a corta distancia de la costa, no son necesarios lances largos, con 50 metros nos sobrará distancia. Además, la lubina estará comiendo en la rompiente, camuflada entre la espuma. En esa zona la mar mueve mucho y lógicamente una caña larga y flexible, nos defenderá del embate del oleaje mucho mejor que una corta y dura, tipo surfcasting, ya que el ángulo de incidencia del nylon será mucho mayor y por tanto menos cantidad de hilo en contacto con el agua. Por otro lado, los peces picarán mas confiados al notar mucho menos resistencia cuando tengan el cebo en la boca.
Carrete. Para este propósito, nos servirá cualquier carrete tipo surfcasting con bobina grande, a fin de facilitar la salida de hilo. Es conveniente que el ratio sea alto.
Plomos Son muy recomendables los plomos de estrella con los pesos especificados anteriormente. En caso de mar muy movida, se pueden usar plomos de grapas, osea con alambres autodesenganchables. Si los que encuentras en el mercado son demasiado grandes, se puede quitar peso con una simple navaja hasta dejarlos adecuados a la acción de tu caña.
Cebo Utilizaremos filete de sardina, como cebo mas apropiado a este tipo de técnica. También se puede utilizar Pixelin o Lanzón, si disponemos de él.
Preparación de la sardina. La sardina la meteremos previamente en salmuera, con el fin de que se endurezca y tenga una buena presencia. Además de esta forma y si la mantenemos fría incluso cuando vayamos a la playa, conservándola en una nevera portátil, puede aguantar perfectamente 4 días.La salmuera la prepararemos disolviendo 300 grs de sal en un litro de agua. Es conveniente revolver hasta que se disuelva. Tener en cuenta que el agua se satura al 37,5% con el agua a 0º C. Osea, esta cantidad será suficiente. Si se sobrepasa, tampoco pasa nada, quedará la sal sin disolver. Es importante desescamar las sardinas antes de meterlas en salmuera.Las conservaremos en la nevera y nunca en el congelador.
Estado de la mar. Para pescar con esta técnica es imprescindible que el mar se mueva. Debe haber un mínimo de 3 olas rompiendo al mismo tiempo (frecuencia). Si hay 4, 5 o 6, las condiciones son ideales. Las olas no deben ser demasiado grandes ni demasiado pequeñas. Olas entre 1,5 y 2,5 como máximo, son adecuadas.Por ultimo, recordar que con la mar echada, esta modalidad no será efectiva. La lubina es un gran depedrador y es capaz de cazar en las mas duras rompientes sin ningún problema.Espero que os sirva de ayuda. Si así fuese, me alegraría.Un saludo y buena pesca.Y quiero acabar el apartado de indicaciones para la pesca con este consejo o recomendación. Puesta en libertad de cualquier ejemplar que nuestra conciencia indique como INMADURO. No solo hay que hacer caso de las tallas mínimas, debemos pensar que éstas están hechas para pesca comercial y nos resultan hasta demasiado benevolentes. Nuestro propio criterio es el acertado si somos responsables y sabemos lo que queremos para el futuro. Poner en libertad al PEZ pequeñín.. nuestros hijos lo agradecerán.
INDICACIONES PARA LA PESCA (Resumen) .- Es una de las presas mas perseguidas, muchas veces de una forma disparatada, por los pescadores deportivos a causa de su exquisita carne, desde la orilla y desde la barca, con cañas de lanzar y con cañas de sedal fijo, con lienzas de mano y también con el curricán en el mar abierto. Se obtienen buenos resultados con la caña fija, tanto si lleva el plomo fijo sobre el fondo como si lleva corcho. Se necesita una caña de 8 a 9 m, fuerte y elástica; hilo robusto de Damyl de 0,26 a 0,35 mm con calamento de 0,20 a 0,30 mm oportunamente lastrado, si se decide pescar sobre el fondo o provisto de un buen flotador si se pesca a una cierta altura de el. Los anzuelos son bronceados, con pala de numero comprendido entre el 6 y el 8; como cebo sirve una sardina fresca, un calamar, pata de pulpo pelada, o, mejor aun, un cangrejo vivo. Eficaces, aunque se requiere tiempo y paciencia, son las lienzas muertas que, provistas de plomo en forma de oliva con anzuelo cebado como lo mencionado antes, se lanzan y abandonan en la mar sobre fondos rocosos, entre escolleras y en el interior de los puertos a lo largo de los muelles, sobre todo en las ultimas horas de la tarde y primeras de la noche. La caña de lanzar es optima sobre las rompientes de la escollera y sobre las playas arenosas si se pesca a la americana. Se necesita una buena caña de fibra de vidrio, elástica y robusta, provista de un carrete de bobina fija en muy buenas condiciones. El sedal de hilo fuerte y no inferior al 0,30 mm, con final dotado de un flotador lastrado si se pesca entre los escollos, y de un plomo en forma de oliva si se pesca sobre la playa, en ambos casos se prefiere cebo artificial (anguila de goma, cucharilla ondulante o una lengüeta de piel blanca. Es fácil capturar ejemplares de talla notable pescando al curricán tanto a fondo como en superficie. Para este tipo de pesca la embarcación debe navegar a una velocidad no superior a 2 o 3 nudos, en dirección paralela a la costa, la caña habitualmente es corta (2m) y robusta, carrete de gran capacidad. Si se pesca sobre el fondo se lastra la cameta con grandes plomos en forma de oliva, escalonados, siendo su peso total de 300 a 500 gr. Como cebo la cucharilla ondulante o la anguila de goma. Desde la barca fondeada o al pairo, se puede intentar, con mayor eficacia, con aparejos de mano, sin embargo, es necesario lanzar abundante pasta compuesta por sardina, crustáceos y moluscos triturados mezclado con arena.
LUBINA CON COMPOTA DE CEBOLLA.-- Ingredientes
Lubina de 1 kg.
4 cebollas grandes
Media taza de nata líquida
Media taza de vino Pedro Ximénez
Media taza de caldo de pescado.
1 trufa fresca
3 cucharadas de aceite de oliva virgen
Pimienta molida
20 grs. de harina
1 cucharadita de azúcar
Sal
Elaboración
Cortar las cebollas en aros finos y colocarlas en una cazuela de barro tapada. Hornear y dejar que suden pero que no cojan color. Agregar el vino y la mitad de la nata. Colocar la mezcla en un cazo al fuego, agregar el azúcar y mantener en el fuego hasta conseguir una consistencia de compota. Poner en un cazo al fuego la nata restante con el caldo y mantener hasta que reduzca a la mitad. Agregar la trufa picada y cocer 5 minutos. Rectificar de sal. Lavar la lubina, secarla, quitar la espina central y cortar en supremas o filetes; enharinarlos y freírlos. Sacar y escurrir. Para servir, repartir la compota de cebolla en el centro de 4 platos, colocar los medallones de lubina sobre ella y cubrir con la salsa de trufa. Acompañar con patatas y judías verdes al vapor.
Aparejo Yo recomendaría de un 0.35 a un 0,40. Como no se trata de efectuar lances largos, el usar hilos muy finos con puente cónico no tiene objeto y además podría ocasionarnos la pérdida de una gran lubina. Cacea, 0,40. Aquí no importa en exceso la visibilidad del hilo. La cacea tendrá una longitud entre 1,5 y 2 metros. Si el mar está muy bravo, puede ser necesario acortarla para evitar enredos del aparejo.
Plomos Son muy recomendables los plomos de estrella con los pesos especificados anteriormente. En caso de mar muy movida, se pueden usar plomos de grapas, osea con alambres autodesenganchables. Si los que encuentras en el mercado son demasiado grandes, se puede quitar peso con una simple navaja hasta dejarlos adecuados a la acción de tu caña.
Cebo Utilizaremos filete de sardina, como cebo mas apropiado a este tipo de técnica. También se puede utilizar Pixelin o Lanzón, si disponemos de él.
Preparación de la sardina. La sardina la meteremos previamente en salmuera, con el fin de que se endurezca y tenga una buena presencia. Además de esta forma y si la mantenemos fría incluso cuando vayamos a la playa, conservándola en una nevera portátil, puede aguantar perfectamente 4 días.La salmuera la prepararemos disolviendo 300 grs de sal en un litro de agua. Es conveniente revolver hasta que se disuelva. Tener en cuenta que el agua se satura al 37,5% con el agua a 0º C. Osea, esta cantidad será suficiente. Si se sobrepasa, tampoco pasa nada, quedará la sal sin disolver. Es importante desescamar las sardinas antes de meterlas en salmuera.Las conservaremos en la nevera y nunca en el congelador.
Estado de la mar. Para pescar con esta técnica es imprescindible que el mar se mueva. Debe haber un mínimo de 3 olas rompiendo al mismo tiempo (frecuencia). Si hay 4, 5 o 6, las condiciones son ideales. Las olas no deben ser demasiado grandes ni demasiado pequeñas. Olas entre 1,5 y 2,5 como máximo, son adecuadas.Por ultimo, recordar que con la mar echada, esta modalidad no será efectiva. La lubina es un gran depedrador y es capaz de cazar en las mas duras rompientes sin ningún problema.Espero que os sirva de ayuda. Si así fuese, me alegraría.Un saludo y buena pesca.Y quiero acabar el apartado de indicaciones para la pesca con este consejo o recomendación. Puesta en libertad de cualquier ejemplar que nuestra conciencia indique como INMADURO. No solo hay que hacer caso de las tallas mínimas, debemos pensar que éstas están hechas para pesca comercial y nos resultan hasta demasiado benevolentes. Nuestro propio criterio es el acertado si somos responsables y sabemos lo que queremos para el futuro. Poner en libertad al PEZ pequeñín.. nuestros hijos lo agradecerán.
INDICACIONES PARA LA PESCA (Resumen) .- Es una de las presas mas perseguidas, muchas veces de una forma disparatada, por los pescadores deportivos a causa de su exquisita carne, desde la orilla y desde la barca, con cañas de lanzar y con cañas de sedal fijo, con lienzas de mano y también con el curricán en el mar abierto. Se obtienen buenos resultados con la caña fija, tanto si lleva el plomo fijo sobre el fondo como si lleva corcho. Se necesita una caña de 8 a 9 m, fuerte y elástica; hilo robusto de Damyl de 0,26 a 0,35 mm con calamento de 0,20 a 0,30 mm oportunamente lastrado, si se decide pescar sobre el fondo o provisto de un buen flotador si se pesca a una cierta altura de el. Los anzuelos son bronceados, con pala de numero comprendido entre el 6 y el 8; como cebo sirve una sardina fresca, un calamar, pata de pulpo pelada, o, mejor aun, un cangrejo vivo. Eficaces, aunque se requiere tiempo y paciencia, son las lienzas muertas que, provistas de plomo en forma de oliva con anzuelo cebado como lo mencionado antes, se lanzan y abandonan en la mar sobre fondos rocosos, entre escolleras y en el interior de los puertos a lo largo de los muelles, sobre todo en las ultimas horas de la tarde y primeras de la noche. La caña de lanzar es optima sobre las rompientes de la escollera y sobre las playas arenosas si se pesca a la americana. Se necesita una buena caña de fibra de vidrio, elástica y robusta, provista de un carrete de bobina fija en muy buenas condiciones. El sedal de hilo fuerte y no inferior al 0,30 mm, con final dotado de un flotador lastrado si se pesca entre los escollos, y de un plomo en forma de oliva si se pesca sobre la playa, en ambos casos se prefiere cebo artificial (anguila de goma, cucharilla ondulante o una lengüeta de piel blanca. Es fácil capturar ejemplares de talla notable pescando al curricán tanto a fondo como en superficie. Para este tipo de pesca la embarcación debe navegar a una velocidad no superior a 2 o 3 nudos, en dirección paralela a la costa, la caña habitualmente es corta (2m) y robusta, carrete de gran capacidad. Si se pesca sobre el fondo se lastra la cameta con grandes plomos en forma de oliva, escalonados, siendo su peso total de 300 a 500 gr. Como cebo la cucharilla ondulante o la anguila de goma. Desde la barca fondeada o al pairo, se puede intentar, con mayor eficacia, con aparejos de mano, sin embargo, es necesario lanzar abundante pasta compuesta por sardina, crustáceos y moluscos triturados mezclado con arena.
LA RECETA.- LUBINA AL CABRALES .- Ingredientes
1 lubina grande 2 kg de sal gorda 150 g de queso de cabrales 6 cucharadas de leche 4 cebollitas francesas 3 cucharadas de aceite de oliva Sal
Elaboración.- Ponemos la lubina en una fuente de horno y ponemos 1 kg de sal gorda humedecida cubriendo todo el fondo, colocamos la lubina encima y la cubrimos con el otro kg de sal humedecida, apretamos contra el pescado la nueva capa de sal que hemos puesto. Metemos la fuente en el horno a una temperatura de 220 grados durante 50 minutos, ponemos en una sartén el aceite y las cebollitas picadas y sazonadas con sal, las sofreímos a fuego suave y cuando estén transparentes, añadimos el queso de cabrales desmenuzado, removemos todo con unas varillas hasta que se deshaga el queso por completo. Añadimos la leche poco a poco sin dejar de remover hasta que quede una mezcla espesa y ligada. Quitamos la salsa del fuego, y le añadimos dos yemas de huevo, removemos. Cogemos la lubina del horno, le quitamos la sal y acompañaremos con la salsa de cabrales.
1 lubina grande 2 kg de sal gorda 150 g de queso de cabrales 6 cucharadas de leche 4 cebollitas francesas 3 cucharadas de aceite de oliva Sal
Elaboración.- Ponemos la lubina en una fuente de horno y ponemos 1 kg de sal gorda humedecida cubriendo todo el fondo, colocamos la lubina encima y la cubrimos con el otro kg de sal humedecida, apretamos contra el pescado la nueva capa de sal que hemos puesto. Metemos la fuente en el horno a una temperatura de 220 grados durante 50 minutos, ponemos en una sartén el aceite y las cebollitas picadas y sazonadas con sal, las sofreímos a fuego suave y cuando estén transparentes, añadimos el queso de cabrales desmenuzado, removemos todo con unas varillas hasta que se deshaga el queso por completo. Añadimos la leche poco a poco sin dejar de remover hasta que quede una mezcla espesa y ligada. Quitamos la salsa del fuego, y le añadimos dos yemas de huevo, removemos. Cogemos la lubina del horno, le quitamos la sal y acompañaremos con la salsa de cabrales.
LUBINA CON COMPOTA DE CEBOLLA.-- Ingredientes
Lubina de 1 kg.
4 cebollas grandes
Media taza de nata líquida
Media taza de vino Pedro Ximénez
Media taza de caldo de pescado.
1 trufa fresca
3 cucharadas de aceite de oliva virgen
Pimienta molida
20 grs. de harina
1 cucharadita de azúcar
Sal
Elaboración
Cortar las cebollas en aros finos y colocarlas en una cazuela de barro tapada. Hornear y dejar que suden pero que no cojan color. Agregar el vino y la mitad de la nata. Colocar la mezcla en un cazo al fuego, agregar el azúcar y mantener en el fuego hasta conseguir una consistencia de compota. Poner en un cazo al fuego la nata restante con el caldo y mantener hasta que reduzca a la mitad. Agregar la trufa picada y cocer 5 minutos. Rectificar de sal. Lavar la lubina, secarla, quitar la espina central y cortar en supremas o filetes; enharinarlos y freírlos. Sacar y escurrir. Para servir, repartir la compota de cebolla en el centro de 4 platos, colocar los medallones de lubina sobre ella y cubrir con la salsa de trufa. Acompañar con patatas y judías verdes al vapor.
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