LOS SECRETOS DE LA PESCA.


Las mejores ciudades



1
. Toulouse, Francia. -
Galerías de arte en locales industriales reconvertidos, una vibrante escena de cafés, cocina excepcional y 'flânerie' por las soleadas orillas de ríos y canales hacen de este "París en miniatura" un atractivo destino de fin de semana. Toulouse está en auge (se calcula que su población aumentará en 90 000 habitantes en la próxima década), así que ahora es el momento de disfrutar de su cautivador 'art de vivre'.


Nuevas opciones culturales. -
Desde volar a la luna en un simulador que imita las sensaciones físicas que experimenta un astronauta en el museo espacial Cité de l'Espace hasta buscar talleres donde los artesanos recuperan el arte medieval del teñido con glasto para crear todos los tonos de azul, las propuestas culturales de Toulouse sorprenden y deleitan.


En otoño del 2025 reabrirá el Musée des Augustins tras años de mejoras. En un complejo conventual del s. XIV, con claustros y ecos de la vida monástica de antaño llenando sus galerías, el museo es el bastión del arte de Toulouse desde 1795. Y una nueva y estimulante museografía hará que su excepcional colección de tallas y esculturas, que abarca del s. xiii a principios del s. XX, sea también accesible para los visitantes con discapacidades, y rutas innovadoras por las exposiciones arrojarán nuevas perspectivas sobre antiguas obras maestras.


En el 2024 ha reabierto la Fondation Bemberg en un hôtel particulier (mansión) renacentista construido en 1562 para el mercader Pierre II d'Assézat, que hizo fortuna en Toulouse comerciando con glasto. Acoge desde obras de Cranach hasta pinturas postimpresionistas, cerámica, mayólica, esmalte, marquetería y otros objets d’art. Los 'viejos' espacios artísticos –Les Abattoirs Musée-Frac Occitanie Toulouse, Galerie Le Château d'Eau, Espaces EDF Bazacle– siguen siendo tan vanguardistas como cuando abrieron en un matadero renovado, una antigua torre de agua y una central hidroeléctrica reconvertida, respectivamente.


Epicureísmo contemporáneo. -
Toda visita a Francia debe incluir su deliciosa cocina tradicional. En Toulouse se encontrarán bistrós que preparan humeantes cuencos de cassoulet (guiso de pato, salchicha y alubias), mercados repletos de productos de temporada del soleado suroeste y la santísima trinidad de pato, saucisse de Toulouse (salchicha de cerdo) y brandi de Armañac. Los chefs innovan en Les Halles de la Cartoucherie, que abrió en el 2023 en una fábrica de munición reconvertida en zona de restauración, espacio de coworking y sala de conciertos.


Como un 'flâneur' francés. -
Aunque los tolosanos esperan con ansia la inauguración de la tercera línea de metro en el 2025, para los visitantes de fin de semana, el típico 'flânerie' (callejear sin rumbo) sigue siendo la mejor manera de desplazarse. Este antiguo baluarte romano fue reconstruido con ladrillos rosados, de ahí su sobrenombre de La Ville Rose (Ciudad Rosa), en el s. XVII, y la mejor manera de conocerlo es paseando por las arboladas orillas del río Garona y el Canal du Midi, una vía fluvial en la lista de la Unesco que atraviesa Toulouse en su ruta de 360 km por Francia desde el Mediterráneo hasta el Atlántico.


Hay que perderse en la maraña de calles sin tráfico del Vieux Quartier (casco antiguo) y entre los cafés llenos de estudiantes de Place du Capitole. O ver una curiosa colección de criaturas mecánicas gigantes dando un paseo desde su sede en Halle de la Machine y desear que se repita la fabulosa ópera callejera urbana que su compañía de teatro representó a finales del 2024. Se aconseja deambular para empaparse del caleidoscopio de rojos, rosas y ámbares salpicados por la luz del sol, y sentir el ritmo de esta ciudad cautivadora, a veces peculiar y poco conocida del sur de Francia.


2
. Puducherry, India. -
Sobre el golfo de Bengala, en el sureste de la India, Puducherry (anteriormente Pondicherry) hace tiempo que atrae a los visitantes con su arquitectura gala –vestigio del pasado de la ciudad como colonia francesa intermitente hasta 1954– y sus templos, iglesias y centros espirituales. También es la ciudad más cercana a Auroville, un experimento espiritual panreligioso con residentes procedentes de todo el mundo. Ahora, gracias a un vasto proyecto para recuperar las playas de arena erosionadas por el mar, Puducherry se está reinventando también como destino para los amantes de la arena y el surf.


Litoral recuperado. -
Si bien Puducherry tiene todos los elementos de una escapada costera, las últimas tres décadas faltaba algo clave: una playa. Las franjas arenosas de costa que bordeaban la ciudad desaparecieron a principios de la década de 1990 por efecto (inesperado) de la construcción en 1989 del puerto. Hasta hace poco los visitantes de Puducherry tenían que salir de la ciudad para poder disfrutar de un día de playa o limitarse a recorrer el paseo marítimo de 1,2 km, separado del golfo de Bengala por un malecón al que se llamó Rock Beach.


Gracias a los esfuerzos conjuntos del gobierno local y el Instituto Central de Investigación de Pesquerías Marinas de la India, se está recuperando la costa arenosa de la ciudad, en gran parte mediante arrecifes artificiales diseñados para remodelar el litoral y atraer peces a la zona, un regalo para los pescadores.


Aunque caminar por el paseo marítimo de Rock Beach, algodón de azúcar en mano, aún es una forma popular de pasar el rato, sobre todo al atardecer, ya hay nuevos tramos de playas de arena, como la adecuadamente llamada New Beach. Un vasto proyecto de instalación de arrecifes en los años 2023-2024 espera recuperar más arena para que Puducherry recobre su gloria playera.


En busca de espiritualidad. -
Aunque la mayoría de los residentes de Puducherry son hindúes, hay una gran población católica y las majestuosas iglesias y catedrales de la ciudad son parte de su esplendor. Destaca la catedral de la Inmaculada Concepción, del s. XVIII, un imponente edificio blanco con detalles en amarillo y esculturas de ángeles. Igual de vistosa, Nuestra Señora de los Ángeles atesora una fachada neoclásica de un suave tono coralino con columnas gemelas flanqueando la entrada. En el interior, pilastras corintias sostienen su enorme techo. 


Pese a la abundancia de iglesias, Puducherry es una ciudad hindú. De hecho, el viajero topará enseguida con algún un templo dravídico coronado por una vimana (torre) cónica y adornado con esculturas de vivos colores de entidades y animales etéreos. Entre los más populares se cuenta el centenario Manakula Vinayagar, en el barrio de White Town. Está dedicado a Ganesh, el dios con cabeza de elefante del panteón hindú, y alberga numerosos frisos coloridos que representan distintas escenas mitológicas.


Otro lugar destacado es el 'ashram' de Sri Aurobindo, fundado por el político convertido en yogui Sri Aurobindo y su colaboradora francesa, Mirra Alfassa, conocida como "La Madre". Los aspirantes llegan para practicar el yoga integral propio de este centro; los turistas pueden realizar una visita de 3 h por él y por los talleres artesanales que lo sustentan. La Madre también impulsó el establecimiento de Auroville, una comunidad intencional al norte de la ciudad. Fundada en 1968 como una "ciudad universal donde hombres y mujeres de todos los países sean capaces de vivir en paz y progresiva armonía por encima de todo credo, política y nacionalidad", Auroville atrae a visitantes de todo el planeta. Muchos acuden para ver la pieza central de la comunidad, Matrimandir, una cúpula geodésica dorada estilo pelota de golf que alberga una esfera de vidrio gigante.


3
. Bansko, Bulgaria. -
Bansko, una pequeña ciudad entre los majestuosos picos de los montes Pirin de Bulgaria, es un popular destino de esquí desde hace décadas. Pero, en los últimos años, este pintoresco pueblo se ha convertido en un lugar que atrae a muchos teletrabajadores. Ahora figura en el mapa como uno de los mejores destinos para nómadas digitales, y atrae a adictos a la adrenalina y a profesionales independientes de distintos ámbitos. Por ello, su imagen está cambiando rápidamente de un centro turístico invernal a un atractivo paraíso vacacional y laboral todo el año.


Aprovechar el momento. -
La magia de Bansko radica en parte en su ambiente relajado y ahora multicultural. La unida y acogedora comunidad de expatriados, nómadas internacionales y búlgaros integra rápidamente a los recién llegados. Resulta más fácil y rápido entablar buenas relaciones en este lugar que en cualquier gran ciudad del mundo. La influencia internacional ha hecho que en los últimos años hayan surgido muchos lugares nuevos: locales de cerveza artesanal, cafeterías acogedoras y panaderías modernas. Con su bajo coste de la vida, clima excepcional, entorno natural y animada vida social, Bansko es sin duda una opción mejor que otros destinos más conocidos. 


Pese al ambiente cosmopolita y la reciente fama, aún tienen lugar celebraciones tradicionales búlgaras. En enero los famosos Kukeri desfilan por la ciudad con sus elaborados trajes. El 14 de febrero los lugareños celebran el Día del Vino en lugar de San Valentín, y muchas bodegas de la zona abren sus puertas a los visitantes. En marzo se verán pulseras rojas y blancas a la venta por todas partes; se cree que traen salud y buena suerte. Y durante los festejos de Pascua, en mayo, los lugareños pintan y 'pelean' con huevos duros. 


Las tradiciones también se conservan en la cocina. En una mehana (taberna) se sirven recetas antiguas con productos de origen local en un ambiente genuino. Algunos de los platos más célebres de la región son kapama (repollo agrio y carne), banski starets (salchicha) y chomlek (ternera y patatas).


Ciudad pequeña, mucha diversión. -
No hay que dejarse engañar por el tamaño de Bansko; aunque sea una ciudad pequeña, ofrece muchas actividades y eventos durante todo el año. Desde ciclismo de montaña, snowboard y esquí hasta excursionismo y montañismo, este lugar es una delicia para los amantes del aire libre. Y los vecinos lo saben. El municipio lleva años organizando eventos y festivales centrados en la montaña para hacer de la ciudad un destino de todo el año. 


El Bansko Film Fest reúne a montañeros de renombre y a cineastas de aventuras independientes para mostrar sus trabajos. Por su parte, el Bansko Jazz Festival, un evento al aire libre, atrae a músicos y aficionados al jazz de todo el mundo. Un festival de ópera al aire libre, otro de rock y muchas otras actividades culturales completan el calendario festivo. 


El auge del nomadismo digital en la ciudad llevó a la creación de una celebración muy particular, el Bansko Nomad Fest, que dura una semana y reúne a cientos de trabajadores autónomos, profesionales que trabajan a distancia y emprendedores para celebrar este estilo de vida y compartir sus experiencias. Es uno de los eventos de este tipo más importantes del mundo y programa interesantes talleres, conferencias inspiradoras, eventos de networking, viajes de aventura y mucho más.


Encanto local. -
Bansko atesora una larga historia como destino de expatriados, pero su verdadero atractivo reside en los vecinos. Tras romper su reserva inicial, surge la esencia de la hospitalidad búlgara. Y no hay que olvidar que es solo una de las maravillas de la región de los Balcanes. La ciudad puede ser el primer capítulo del viaje, una invitación a descubrir mucha más belleza allende sus grandes encantos.


4
. Chiang Mai, Tailandia. -
Desde saludos que se saltan el "hola" y van directos al "¿ya has comido?" hasta acaloradas discusiones nacionales sobre qué verdura es adecuada en un salteado de albahaca sagrada, la cocina tailandesa tiene más dimensiones que dulce, agrio, salado y picante. Y Chiang Mai eleva el amor del país por los sabores únicos a otros niveles. Aunque existen rutas gastronómicas, elaborar un viaje desde un puesto en el mercado hasta una experiencia gastronómica de mil euros puede resultar mucho más gratificante y, además, mucho más sabroso.


En el mercado. -
La mejor manera de disfrutar la auténtica cocina tailandesa es en su origen: el mercado. Aunque se deben priorizar los ingredientes crudos, hay algunos lugares de visita obligada en una primera incursión en la comida tailandesa.


El de Kad Luang, también conocido como Warorot, es el mercado más grande y antiguo de Chiang Mai, lugar de comercio desde la fundación de la ciudad en 1296. La planta baja está dedicada a la comida, con especialidades del norte de Tailandia como la picante salchicha sai oua, chicharrones y salsa de chiles tiernos. Dam Rong es el puesto preferido de los lugareños para estas delicias. Los sabores dulces de coco y pandán de Thai Sweets Under the Stairs ayudan a mitigar el picor.


Especialidades del norte de Tailandia. -
A medida que el viajero se adentre más en la ciudad, debería centrarse en la singular cocina del norte de Tailandia. El restaurante Han Thueng Chiang Mai es uno de los favoritos locales y sirve platos genuinos del norte tan atrevidos como picantes. Los más osados pueden probar sus tortillas de huevos de hormiga recomendadas por Bib Gourmand y sus especialidades de la selva.


Otra opción es Tong Tem Toh, en Nimmanhaemin Rd, cuya bandeja de entremeses norteños es ideal para los neófitos. Huan Soontaree, junto al apacible río Ping, ofrece una experiencia gastronómica inolvidable con actuaciones nocturnas de la famosa cantante folclórica Soontaree Vechanont. 


El 'khao soi' es probablemente el plato más famoso de la ciudad. Esta sopa de fideos con curri y coco originaria de Chiang Mai se hizo célebre hace poco al ser galardonada como la mejor sopa del mundo por TasteAtlas. Para probar la original, hay que ir al famoso Khao Soi Lung Prakit Kad Kom, o, los más aguerridos, al Khao Soi Nimman, cuya amplia carta de ingredientes alternativos pone a prueba el paladar.


Chiang Mai es también un lugar perfecto para saborear las genuinas cocinas shan y birmana. Swan Burmese Cuisine quizá sea el restaurante más popular de la ciudad para esta última, pero los bocados de Free Bird Cafe sirven para ayudar al desarrollo social. Por otro lado, en Payod Shan Food se puede encontrar comida tribal auténtica que, además, es vegana.


Estrellas culinarias. -
También hay establecimientos recomendados por Michelin. Blackitch Artisan Kitchen, con su menú de 10 platos de origen sostenible que fusiona influencias tailandesas, japonesas y chinas, supera todas las expectativas. Loin.cnx ofrece complejos sabores tailandeses y una presentación artística. Y los célebres menús de degustación del chef Nan, en Cuisine de Garden, ilustran la creatividad de un entusiasta de la comida de antaño de Chiang Mai.


Se puede acabar este recorrido culinario deleitándose con la comida estadounidense de Dinky's BBQ o probando la genuina cocina del este de Asia en uno de los más de cien restaurantes japoneses. Ya se sea un gourmet experimentado o simplemente un viajero curioso, la escena culinaria de Chiang Mai ofrece algo nuevo y emocionante a cada paso. Solo queda reservar el billete a este paraíso gastronómico.


5
. Génova, Italia. -
Como todas las grandes ciudades portuarias, Génova es un mundo. A lo largo de la columna norte de la península italiana se siente la fuerte vitalidad de la capital de Liguria, que está rodeada por un litoral abrupto, casi intimidante. Quienes conocen Génova guardan el secreto celosamente, temiendo que su fuerza se diluya si se conoce demasiado. Pero una ciudad capaz de crear una flota poderosa, acumular riquezas incalculables y convertir la albahaca en pesto merece todos los elogios. También merece estar en la lista de lugares por descubrir.


Escapada a la ciudad inteligente. -
En una época en que se viaja teniendo en cuenta la sostenibilidad, Génova destaca como un ejemplo único de cuánto se puede hacer si se usa la creatividad para aunar lo antiguo y lo moderno. Durante mucho tiempo esta ciudad ha sido un destino familiar para los viajeros por mar; su puerto es el segundo más grande de Italia y uno de los mayores del Mediterráneo.


Pero durante la pandemia los visitantes nacionales se convirtieron en la principal fuente de ingresos del turismo, lo que llevó a residentes y empresas a repensar su oferta. Esto dio lugar al proyecto Tourism Friendly Cities, un diálogo apoyado por la UE entre visitantes, vecinos y empresas para crear comunidades accesibles y resilientes en ciudades de tamaño medio.


Así han surgido iniciativas como Levante Waterfront, un proyecto residencial y comercial casi sin emisiones dirigido por el famoso arquitecto genovés Renzo Piano. La digitalización también ha avanzado rápidamente: el Genoa City Pass brinda acceso a todos los museos y atracciones de la ciudad a través de una aplicación que los visitantes descargan de forma gratuita en sus teléfonos móviles, y el proyecto BlueMed brinda a los nómadas digitales internet de alta velocidad. Junto con los programas de renovación urbana y un acuario ya emblemático, es la escapada perfecta.


Atractivo centro urbano. -
La historia y topografía de Génova forman un entorno urbano único, donde las sinuosas callecitas, o caruggi, conducen a tesoros escondidos que rezuman una riqueza y decadencia que el viajero esperaría encontrar en Florencia o Roma. Gracias a la inversión privada, las residencias nobles que otrora albergaron a dignatarios de visita, como los Palazzi dei Rolli, Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, se están transformando en hoteles-boutique, galerías elegantes y museos inmersivos. Pasear por el denso laberinto del centro antiguo resulta embriagador por los olores y sonidos que resuenan en los gruesos muros de piedra. Es una ciudad abrazada por el tiempo, no atrapada en él.


En cuanto a olores, Génova es un destino no solo para los amantes de la comida, sino también para los estudiosos de la gastronomía. A principios de primavera se celebra el Campeonato Mundial de Pesto al Mortero. Si no se puede asistir, siempre queda la opción de ir al Mercato Orientale, el histórico mercado de abastos en el corazón (o el estómago) de la ciudad, para saborear focaccia y raviolis mientras los lugareños conversan en dialecto ligur.


Suficientemente conectado. -
El terreno montañoso de Génova ha hecho que su acceso desde el resto de Italia implicara largos trayectos en automóvil o aún más largos en tren. Pero con la finalización del nuevo tren de alta velocidad Terzo Valico prevista para el 2026 (quizá en parte operativo antes), la ciudad será fácilmente accesible desde Turín y el Piamonte. También hay un plan municipal para que toda la ciudad esté conectada por transporte eléctrico a mediados del 2025, junto con 70 km de carriles-bici. Aunque las conexiones ferroviarias de alta velocidad desde Roma y Milán aún quedan lejos, Génova es cada vez más accesible para visitas cortas y, con la popularidad cada vez mayor de Cinque Terre y Portofino, la ciudad es una gran base para explorar Liguria.


6
. Pittsburgh, EE UU. -
El reciente renacimiento de Pittsburgh está marcado por joyas nuevas y antiguas. Los enclaves étnicos y los homenajes a iconos culturales como Andy Warhol y Roberto Clemente coexisten junto con una modernidad que marca tendencias y alimenta la escena gastronómica. Pittsburgh, una ciudad firmemente arraigada en su situación geográfica en la intersección de tres ríos y en las tradiciones de generaciones de inmigrantes, está marcado por joyas nuevas y antiguas. Los enclaves étnicos y los homenajes a iconos culturales como Andy Warhol y Roberto Clemente coexisten junto con una modernidad que marca tendencias y alimenta la escena gastronómica.


Es una ciudad asequible, atractiva, discreta y sin pretensiones. Sus sabores y su patrimonio cultural son auténticos y genuinos. Su apetito por el crecimiento y la reinvención –impulsado primero por el acero, la manufactura y la Revolución industrial y más recientemente por la tecnología, la educación y la atención sanitaria– es ambicioso y a menudo visionario. Pittsburgh es un destino ideal.


Lawrenceville, Pensilvania. -
Actualmente no se puede viajar a Pittsburgh sin dedicar un tiempo a Lawrenceville. Situado 10 min en coche al noreste del centro por la orilla sur del río Allegheny, Lawrenceville se ha convertido en la última década en el barrio de moda al reinventar Butler Street, dividida en Upper, Central y Lower Lawrenceville, como una zona peatonal con una serie de cafeterías, tiendas, restaurantes y cervecerías independientes para todos los presupuestos, desde los más elevados hasta los más modestos.


La situación de Lawrenceville junto al Allegheny hizo de ella un valioso enclave durante la guerra de Secesión, cuando albergó un importante arsenal; luego llegó la época industrial del hierro y el acero, ya en la década de 1900. En la segunda mitad del s. XX, como muchas otras comunidades del oeste de Pensilvania, fue víctima de la depresión económica que asoló la zona con el fin de la industria siderúrgica. El momento actual de Lawrenceville, con toques de determinación hipster y un brillo de sofisticación, no se salva de un debate habitual: ¿su éxito se debe a la reinvención o a la gentrificación?


Sea cual sea la respuesta, el crecimiento meteórico de la zona y sus seguidores leales son innegables. Y aportan mucho público a las empresas que impulsan su relevancia cultural: locales de música como Spirit y Thunderbird Cafe, el cine independiente Row House Cinema, galerías de arte y el Roberto Clemente Museum (solo previa reserva), que rinde homenaje a la arraigada tradición deportiva de Pittsburgh y honra la vida y el legado del famoso activista y exterior derecho de los Pittsburgh Pirates en un antiguo parque de bomberos.


Paseando por el Strip. -
A solo una manzana del centro, el Strip District de Pittsburgh, llamado simplemente "el Strip", es una zona agradable y bulliciosa de 1,2 km² que no ha perdido el encanto local que atesora desde hace décadas, una mezcla de personalidades y comercio que dejan entrever los duros orígenes de la ciudad y los reviven para las nuevas generaciones.


Desde el Heinz History Center, un homenaje al pasado de Pittsburgh, y caminando al noreste por Penn Avenue, el Strip es un lugar donde es fácil pasar una mañana o una tarde con un café y biscotes recién hechos. Los cercanos mercados italiano y asiático están flanqueados por puestos de productos agrícolas y vendedores ambulantes que venden desde camisetas de los Steelers hasta pierogi polacos caseros.


Se puede visitar el local original de Primanti Brothers para disfrutar del icónico bocadillo de ensalada de col avinagrada y patatas fritas, típico de Pittsburgh, o ir al cercano Terminal, que acoge una moderna zona de restauración en un antiguo almacén renovado. Incluso los gélidos fines de semana invernales el ambiente tranquilo del vecindario atrae a una multitud.


Tres es el número mágico. -
Las Three Sisters de Pittsburgh son tres puentes idénticos en las calles Sexta, Séptima y Novena, llamados así en honor a las leyendas locales Roberto Clemente, Andy Warhol y Rachel Carson, respectivamente. Cruzan el río Allegheny para conectar el centro con el lado norte. Construidos a finales de la década de 1920, estos puentes amarillos de suspensión son una imagen icónica del centro de Pittsburgh.


7
. Osaka, Japón. -
La tercera mayor ciudad de Japón brilla, literalmente, en sus barrios adornados con luces de neón, y destaca en más de un sentido. Este antiguo puerto comercial es un núcleo artístico progresista, un centro de vida nocturna con una próspera escena LGTBIQ+, un paraíso gastronómico y el lugar donde se hallan algunos de los mejores vendedores ambulantes de comida, locales de música en vivo y tiendas de discos del país. Además, en el 2025 Osaka acoge de nuevo la Expo, una segunda oportunidad de organizar la mejor Exposición Universal de la historia.


Regreso de la exposición. -
Resulta muy apropiado que la Expo Universal, la exposición de diseño innovador y creación científica más grande del mundo, se celebre en Osaka por segunda vez, pues esta es una de las urbes más dinámicas y progresistas del país. Es la primera ciudad de Japón que acoge la feria dos veces, con 55 años de diferencia, entre el 13 de abril y el 13 de octubre del 2025. Tuvo un gran éxito como sede de este evento cultural en 1970, pues fue la Expo con más afluencia de público del s. xx. Aún se puede ver la interesante Torre del Sol en el Parque Conmemorativo de la Expo, antes de visitar el nuevo y deslumbrante emplazamiento en la isla de Yumeshima, en los antiguos astilleros.


Con el tema "Diseñando la sociedad del futuro para nuestras vidas", el programa promete ser estimulante, revelador y con conciencia social, invitando a la interacción antes, durante y después del evento en el People's Living Lab. Igual de emocionante es el propio espacio; arquitectos de vanguardia han diseñado las salas, pabellones y espacios y han mantenido la tradición de los edificios impresionantes de la Expo.


Comer hasta no poder más. -
Osaka goza de una merecida reputación como paraíso para los amantes de la comida, con dos de los platos más deliciosos de Japón: okonomiyaki, una especie de torta con capas de verduras, carne o pescado; y takoyaki, bolas rellenas de pulpo picado o cortado en dados, jengibre y cebolla. A diferencia de en el resto del país, resulta relativamente fácil encontrar versiones veganas, vegetarianas o 'halal' de sus famosos platos.


Se aconseja ir a OKO, que acaba de duplicar su espacio y sirve excelentes versiones veganas y/o sin gluten de ambos platos; o a Genji-soba para los mejores soba y ramen veganos, vegetarianos y sin gluten de la ciudad. La escena gastronómica local no ha pasado desapercibida y el primer Time Out Food Market de Asia se inaugurará en un espacio verde regenerado hace poco, el parque Umekita, unos cientos de metros al noroeste de la estación de trenes.


Arte a otro nivel. -
El Museo de Bellas Artes de la Ciudad de Osaka, el Museo de Historia Natural de Osaka, el Museo de Cerámica Oriental, el Museo de la Ciencia de Osaka, el Museo de Historia de Osaka y el Museo de Arte Nakanoshima ofrecerán en el 2025 una vasta exposición conjunta, “Osaka-Haku”, con una muestra de las piezas que mejor representan la historia y la cultura de la ciudad.


Cada institución ha seleccionado 20 "tesoros de Osaka", tanto antiguos como modernos, recopilados y transmitidos de generación en generación, para que este año los visitantes puedan llegar al corazón de la riqueza y el carisma de la ciudad a través de la historia, las artes, las ciencias y la artesanía.


Aparte de estos grandes centros, se siguen abriendo pequeñas galerías, que brindan a los artistas visuales independientes la oportunidad de mostrar su trabajo. También hay una creciente escena de arte callejero y un proyecto para que los artistas contribuyan con sus murales al paisaje urbano, como el colectivo WALL SHARE.


8
. Curitiba, Brasil. -
Esta famosa y progresista metrópolis del estado de Paraná destaca desde hace tiempo por su planificación urbana y su desarrollo sostenible, y visitarla hace que uno se sienta un poco más optimista sobre la crisis climática. Si bien las raíces verdes de Curitiba se plantaron en la década de 1970, las iniciativas actuales continúan inspirando cambios. Entre las innovaciones recientes, se cuentan una pirámide solar en un antiguo vertedero, jardines de miel biodiversos en parques urbanos y un sistema de bicicletas compartidas.


Autobuses y bicicletas eléctricos. -
Como uno de los 20 miembros fundadores de la red global C40 (una alianza mundial de 96 alcaldes dedicados a abordar la crisis climática), Curitiba lleva mucho tiempo a la vanguardia de la planificación urbana y la ciudad se suele utilizar para probar nuevas iniciativas ambientales. Su sistema integrado BRT (Bus Rapid Transit), con vehículos articulados y estaciones tubulares de la era espacial en toda la zona metropolitana, se ha copiado en más de 150 ciudades.


El BRT comenzó a introducir autobuses híbridos biodiésel-eléctricos a principios de la década del 2010 y, en el 2023 se probaron los dos primeros buses totalmente eléctricos de Suramérica. Se han encargado otros 70 vehículos, por lo que en el 2025 ya se verán más en funcionamiento. Curitiba espera que para el año 2030 un tercio de su flota sea eléctrica.


Las bicicletas eléctricas también contribuyen al cambio. Curitiba introdujo un sistema de bicicletas compartidas en el 2023, con un parque inicial de 500 bicis, la mitad de ellas eléctricas. Estas elegantes máquinas se desbloquean mediante un código QR y una aplicación móvil, y se recargan rápidamente en modernas estaciones inteligentes. Actualmente hay 250 km de carriles-bici en el centro y sus alrededores y se planea ampliar la red a 400 km para el 2025.


Parques sostenibles. -
En Curitiba destacan a simple vista los extensos parques: 48 espacios verdes repartidos por la ciudad. Pero si se mira más de cerca, se verá mucho más. Uno de los más grandes de la metrópolis, Barigui, alimenta sus instalaciones con una pequeña planta hidroeléctrica que usa una cascada y un lago artificiales, y es posible que pronto más parques sigan su ejemplo. 


Barigui y otras zonas urbanas contribuyen a implementar un programa de jardines de miel por toda la ciudad que pretende conservar las poblaciones de abejas nativas y estimular la productividad en las florecientes granjas urbanas. Para atraer insectos, se plantan arbustos vistosos como salvia escarlata, hortensias y jazmín amarillo, además de otros arbustos y árboles. El proactivo alcalde de la ciudad, Rafael Greca, se ha comprometido a plantar 100 000 árboles al año en Curitiba.


Al caminar por las frondosas plazas del centro, uno se ve rodeado de una saludable vegetación: Praça Osorio, en el extremo oeste de la peatonal Calçadão da XV, es como un pequeño trozo de la Amazonia, y Praça Santos Andrade, al este, es un paraíso de simetría floral.


Gastronomía verde. -
Además de sus jardines de miel, el apoyo de Curitiba a los programas de agricultura urbana incluye muchos jardines comunitarios muy productivos, creados en tierras degradadas recuperadas y que ahora firman acuerdos con restaurantes locales. Manu, el más famoso de la ciudad, ganó el premio al restaurante sostenible Flor de Caña en el 2023 por su abastecimiento ético de alimentos y su trabajo con grupos comunitarios.


Coopera estrechamente con los pescadores locales y organiza talleres sobre el desperdicio alimentario y el aprovechamiento de las verduras. Manu también tiene colmenas, y su chef y propietaria, Manoella Buffara, exalumna del restaurante Noma de Copenhague, con tres estrellas Michelin, fue nombrada Mejor Chef Femenina de América Latina 2022 en los prestigiosos premios San Pellegrino y Acqua Panna.


9
. Palma, España. -
Con su floreciente escena gastronómica, su energía creativa y sus fabulosas colecciones de arte, Palma está redefiniendo la idea de una escapada soleada a las islas Baleares y ganando fama como destino elegante y cultural todo el año.


La capital de Mallorca promete inaugurar en el 2025 el esperado paseo marítimo ecológico junto al Mediterráneo para explorar a pie o en bicicleta. Mientras, siguen surgiendo en sus calles, sobre todo en el casco antiguo y en el barrio de Santa Catalina, hoteles patrimoniales de diseño, galerías independientes y algunos de los restaurantes más interesantes de España. 


Paseo revitalizado. -
La esperada novedad de Palma, el paseo marítimo se inaugurará a principios del 2025. Sus 3,5 km bordearán la bahía desde el extremo meridional del casco antiguo hasta Portopí. Este proyecto de 60 millones de euros iniciado en el 2022 transformará por completo una franja del paseo marítimo de la ciudad antes con mucho tráfico, creando un paraíso para peatones y ciclistas con vistas al Mediterráneo. Jardines llenos de palmeras, zonas de descanso al aire libre, parques infantiles, amplios pasos de peatones, rampas accesibles para sillas de ruedas y nuevas estaciones de bicicletas compartidas forman parte del plan liderado por el arquitecto ibicenco Elías Torres; los carriles para vehículos se reducirán significativamente y el tráfico se desviará.


Otras iniciativas ecológicas previstas para este paseo incluyen la instalación de iluminación LED, la plantación de más de 1800 árboles y la creación de sistemas de drenaje sostenibles para reutilizar el agua de lluvia. Tanto para los residentes como para los visitantes enamorados de Palma, será un lugar donde relajarse en los bancos a la sombra de los árboles los meses más cálidos o mientras se toma el sol en invierno. 


Cultura creativa. -
Desde Jorge Luis Borges (quien elogió en poesía la espectacular catedral de Palma) hasta George Sand (que vivió en la Real Cartuja de Valldemossa con Frédéric Chopin), Mallorca lleva años alimentando almas creativas. Palma está en el corazón de la escena cultural de la isla y toda la ciudad es una delicia para los amantes de las artes. Entre las numerosas y fabulosas galerías, destacan la Fundació Miró Mallorca, sobre una colina, y Es Baluard, en el casco antiguo, dentro de las antiguas murallas de Palma, pero hay muchas más opciones.


Ahora es muy probable oír (o incluso unirse) acaloradas discusiones en clubes de lectura en cafés, conocer artistas contemporáneos (mallorquines y foráneos) en sus nuevos estudios de Palma o encontrar tiendas dedicadas a continuar siglos de tradición de artesanía local. La anual Nit de l'Art (Noche del Arte) programa exposiciones y actuaciones en el centro histórico de Palma y celebrará su 29ª edición en septiembre del 2025.


Toda esta creatividad se está extendiendo a una serie de hoteles-boutique que está recuperando antiguos edificios patrimoniales como lugares mágicos y de diseño vanguardista y que hacen hincapié en el arte mallorquín, la artesanía local y la cálida luz mediterránea. 


Escena gastronómica. -
En los últimos años, Palma se ha convertido en un foco de atención gastronómica dentro de España, pero cualquier enamorado de la capital ya sabe que comer y beber en esta ciudad es un placer. Tanto si apetece una sencilla tostada con sobrasada mallorquina, una ensaimada espolvoreada con azúcar para acompañar un café o un menú de degustación de alta cocina inspirado en Mallorca, Palma rivaliza con otras capitales gastronómicas de España. Los productos de temporada, cultivados localmente y a menudo ecológicos, constituyen una gran parte del secreto, y proceden de fincas distribuidas por toda la isla y animados mercados urbanos donde los chefs compran los ingredientes del día.


Algunos de los restaurantes nuevos más populares están abriendo sus puertas en el artístico distrito de Santa Catalina (al oeste del casco antiguo), donde el ajetreado mercado del barrio ahora se combina con una serie de cocinas creativas a cargo de chefs aventureros formados en todo el mundo. De los 16 establecimientos con estrella Michelin repartidos por las islas Baleares en el 2024, cuatro se hallan en Palma. Todo se celebra durante el cada vez más popular festival de tapas TaPalma, que suele tener lugar en noviembre.


10
. Edmonton, Canadá. -
La quinta mayor ciudad de Canadá hace tiempo que es célebre por su legendario festival alternativo y su bohemio barrio de Old Strathcona, pero últimamente se han llevado a cabo grandes esfuerzos para revitalizar su otrora deslucido centro con elegantes rascacielos y modernas instalaciones deportivas y de entretenimiento. En una época de reconocimiento y reconciliación, la ciudad también se ha adaptado al aumento del interés en la cultura indígena con interesantes experiencias inmersivas en lugares como Fort Edmonton y Métis Crossing, en las afueras de la ciudad.


Renacimiento del centro. -
En la última década se han invertido miles de millones de dólares en la regeneración del centro de Edmonton, y barrios enteros se han renovado. Destaca el Ice District, antes una amalgama de edificios vacíos y aparcamientos medio desiertos que se ha transformado en el segundo mayor distrito deportivo y de entretenimiento de Norteamérica. El punto neurálgico para los amantes de los deportes y la música es Rogers Place, un estadio cubierto para 20 734 personas cuyo futurista diseño curvilíneo se alza junto a un hotel de lujo JW Marriott y la Stantec Tower de 250 m de altura, la estructura más alta de Edmonton.


En el ámbito musical, Rogers atrae a artistas como Drake y Paul McCartney; en cuanto a los deportes, es la sede de los Oilers, de la Liga Nacional de Hockey. Ver a los Oilers luchar belicosamente en el hielo sigue siendo un rito de iniciación en Edmonton. Han pasado casi cuatro décadas desde que el equipo, liderado por Wayne Gretzky, apodado "The Great One", ganó la asombrosa cifra de cinco Copas Stanley en siete años. Actualmente el equipo cuenta con el popularmente considerado mejor jugador del mundo, Connor McDavid, y vuelve a ser un gran contendiente, animado por sus apasionados seguidores. Quizá el 2025 podría ser su año.


Volverse un fanático. -
La última incorporación al Ice District es el llamado "Fan Park", en el emplazamiento de un casino demolido. Es un centro de actividades para todo el año, un espacio multiusos que acoge un laberinto de nieve, toboganes de hielo y una pista de patinaje en invierno, y festivales como Sustainival y Rock the District en verano. 


Al expandirse hacia el este, la revitalización urbana ha llegado a Station Lands, donde nuevas residencias esperan atraer a jóvenes profesionales y hacer que el centro sea más atractivo y habitable. En el 2023, Edmonton creó un fondo de dinamización para apoyar las actividades y festivales del centro de la ciudad, con la campaña "Meet me in Downtown" ("Quedamos en el centro"). La idea es hacer el centro más agradable para peatones, bicicletas y vehículos. En consonancia, la red LRT (Light Rail Transit) inauguró la Valley Line en noviembre del 2023, y hay otras 16 estaciones planificadas para el 2026.


Impulso indígena. -
Dado el creciente interés en la conservación y la reconexión cultural, las comunidades indígenas de Alberta han desarrollado iniciativas para que los turistas conozcan su historia, tradiciones y cultura. Se puede obtener información general en el Human History Hall del Royal Alberta Museum, y la interesante Indigenous Peoples Experience del Fort Edmonton Park incorporó una serie especial de narraciones en el 2024. 


Vale la pena conducir algo menos de hora y media al norte hasta Métis Crossing, a orillas del río North Saskatchewan. En 200 Ha de tierras de cultivo propiedad de colonos métis (de ascendencia mestiza europea e indígena) desde finales del s. XIX, un nuevo centro cultural ofrece circuitos y un lujoso alojamiento con la posibilidad de hacer noche. Los circuitos se centran en la música, la danza, la vida tradicional y la reintroducción de especies silvestres nativas, como el bisonte blanco y el uapití. El hotel-boutique cuenta con lujosas habitaciones que se han dotado con cúpulas para observar las estrellas, techos transparentes, suelos calefactados y camas king-size, todo pensado para ver la aurora boreal.


Las mejores regiones



1
. Lowcountry de Carolina del Sur y costa de Georgia, EE UU. -
Un viaje por carretera a través del Lowcountry de Carolina del Sur y Georgia brinda playas doradas, pantanos azotados por el viento y pueblos antiguos que parecen inalterados por el paso del tiempo. Pero bajo este aspecto tranquilo subyace un dinamismo sorprendente. Liderada por las ciudades de Savannah y Charleston, la región se ha convertido en una de las pioneras de EE UU en energía sostenible. Su escena culinaria ha cosechado numerosos e importantes premios gracias a una nueva generación de innovadores chefs. Además, alberga uno de los mejores museos afroamericanos del país.


Aceptar el pasado y soñar con un futuro mejor. -
Hasta hace poco, esta región tenía pendiente abordar su problemática historia relacionada con la esclavitud. Hoy el antiguo muelle de Charleston, donde miles de africanos fueron vendidos como esclavos, se ha convertido en uno de los museos más importantes del sur, el International African American Museum. En sus salas los visitantes emprenden un reflexivo viaje desde la antigua África hasta la actualidad, con muestras sobre el eje atlántico que une África, Europa y América. El museo también trata sobre los gullah geechee (descendientes de esclavos de esta región), y su programa cultural es esencial tanto para lugareños como para foráneos, con talleres de percusión, proyecciones de películas y representaciones.


La zona en torno al museo –que se alza sobre pilotes en el muelle de Gadsden, donde arribaron unos 100 000 africanos esclavizados– ha sido bautizada como African Ancestors Memorial Garden. Las siluetas de las figuras grabadas en el suelo representan a los cautivos en la bodega de un barco, y las figuras arrodilladas recuerdan a los que murieron. La vegetación del jardín combina dos mundos dispares: palmeras africanas crecen sobre Hierochloe odorata propias de Carolina del Sur.


Energía verde, paisajes más verdes. -
Savannah está puliendo sus credenciales ecológicas con el objetivo de cubrir el 30% de sus necesidades energéticas con energía limpia y renovable en el 2025. Al oeste de la ciudad, una nueva planta de vehículos eléctricos (que costará la friolera de 4300 millones de dólares) empezará a producir unos 300 000 coches ese mismo año en uno de los proyectos más grandes de este tipo en EE UU. Miles de nuevos empleos contribuirán al auge económico que la zona ya está experimentando.


Esta región ya era conocida por sus exuberantes parques y elegantes paseos bordeados de robles cubiertos de musgo español, pero nunca hay demasiados espacios verdes. En el 2025 abrirán en Charleston los American Gardens, junto a Meeting St, en el distrito histórico, con árboles de Júpiter, una fuente burbujeante y un pequeño escenario para conciertos, eventos literarios y proyecciones de películas. Por su parte, Hilton Head, costa arriba, está añadiendo zonas verdes, como el Patterson Family Park, que cuenta con un innovador parque infantil inspirado en una granja, así como poesía, murales e historias antiguas diseminadas por él.


Oferta culinaria renovada e innovadora. -
La comida tiene un papel destacado en la visita a la región, con nuevos restaurantes que surgen como flores silvestres y opciones gastronómicas en lugares destacados de la reciente lista de semifinalistas de los premios James Beard. Jacques Larson, de The Obstinate Daughter, nominado a mejor chef del año, sorprende a los comensales con su innovadora mezcla de platos sureños con influencias europeas, servidos junto a la costa en la isla de Sullivan.


Charleston y Savannah están llenas de establecimientos célebres. En Savannah, el Cotton & Rye es considerado por USA Today uno de los mejores restaurantes del país. Actualmente también existen muchos locales fabulosos fuera de las ciudades, desde sitios rústicos como Lowcountry Fish Camp, en Summerville, con sabrosos platos de bagre ennegrecido, hasta Okàn, en Bluffton, donde el galardonado chef Bernard Bennett guía por una expedición culinari por África Occidental, el Caribe y la costa de Carolina del Sur.


2
. Terai, Nepal. -
Nepal es sinónimo del Himalaya, pero las llanuras del sur –una franja de bosques, praderas y humedales conocida como el Terai– muestran una cara totalmente diferente del país. Esta región infravalorada, que ocupa una cuarta parte de su masa continental, es clave por su biodiversidad, con reservas famosas por sus rinocerontes y aves. El Terai también es culturalmente rico y acoge uno de los lugares budistas más importantes del mundo, un templo hindú fabuloso y un centro de cultivo de té. Salvo en algunos puntos, sobre todo el Parque Nacional de Chitwan, aún es fácil evitar las multitudes.


Tierra del rinoceronte de un solo cuerno. -
Coto de caza real antes de convertirse en reserva de fauna, el Parque Nacional de Chitwan desempeñó un papel esencial para salvar de la extinción al rinoceronte de un solo cuerno. Se calcula que este parque, la mayor atracción turística del Terai y Patrimonio Mundial de la Unesco, alberga ahora 694 de estas imponentes criaturas, casi una quinta parte de la población total. Y la cifra crece, por lo que son habituales los avistamientos en safaris en todoterreno, piragua, barco o a pie. También se puede descubrir una gran variedad de otras especies, desde osos perezosos y cocodrilos hasta elefantes y, con suerte, tigres. El trabajo de conservación continúa y hace poco se han visto nutrias lisas por primera vez en dos décadas. 


Al oeste, el Parque Nacional de Bardiya es más tranquilo, aunque igual de cautivador. La zona protegida más grande del Terai es un mundo aparentemente virgen de bosques, sabanas y ríos vigilados por una creciente población de tigres (125 en el 2022), además de unos 38 rinocerontes. Dos de estos han sido recientemente introducidos en el paraíso ornitológico de Koshi Tappu, una reserva de fauna en los humedales del este del Terai que carecía de rinocerontes. Los jóvenes, rescatados por conservacionistas tras ser abandonados cuando eran crías, se unen a cientos de especies de aves y al último grupo que queda del amenazado búfalo de agua en estado salvaje en Nepal. 


Té e iluminación. -
El Terai acoge también dos de los sitios religiosos más importantes del país, que atraen a peregrinos de todo el sur de Asia y otros lugares, pero a relativamente pocos viajeros. 


Rodeado de jardines meditativos, el templo Maya Devi de Lumbini se considera el lugar donde nació Siddhartha Gautama, es decir, Buda, hacia el año 563 a.C. La estructura es uno de los sitios arqueológicos más importantes del país, además de un lugar de enorme significado espiritual. Se alza en un vasto y tranquilo parque donde también se hallan otros templos y monasterios modernos, cuyos diversos estilos reflejan las tradiciones arquitectónicas de las comunidades budistas de todo el mundo, y la reluciente estupa Shanti (pagoda de la Paz), dorada y blanca. 


Unos 300 km al este de Lumbini, en la ciudad sagrada de Janakpur destaca el llamativo Janaki Mandir, un templo hindú finalizado en 1910. Dedicado a la diosa Sita, que se dice que se halló en el lugar cuando era una niña, resulta especialmente evocador por la noche cuando se ilumina con brillantes luces multicolores. Janakpur es también el centro de una renacida tradición artística, la pintura de Mithila, que se remonta a casi tres milenios.


Si se continúa viaje hasta el extremo oriental del Terai, se encontrará la zona productora de té de Ilam, que recibe muy pocos turistas en comparación con la más conocida región de Darjeeling, justo al otro lado de la cercana frontera con la India. Accesibles por una sinuosa carretera, las exuberantes colinas verdes de Ilam están cubiertas de plantaciones de té, en varias de las cuales se ofrecen circuitos y degustaciones; la mejor época para la visita es durante la temporada de recolección, de abril a noviembre. Aparte de producir un té excepcional, los valles, crestas y bosques de pinos, robles y rododendros de Ilam son geniales para practicar senderismo y observar aves.


3
. Chiriquí, Panamá. -
Panamá cautiva a los viajeros desde hace mucho tiempo con la maravilla de la ingeniería que es su famoso canal y el idílico archipiélago de Bocas del Toro, en el Caribe. Menos conocida es la provincia de Chiriquí, en el extremo oeste, donde uno puede gozar de un ecosistema saludable, explorar bosques nubosos y cafetales, subir a volcanes y relajarse en las islas del Pacífico en un parque marino nacional. Los amantes de las aves pueden observar más de 1000 especies; la más emblemática es el quetzal, símbolo sagrado para mayas y aztecas.


Descubrir nuevos senderos. -
Situada en el extremo más occidental del país, la provincia de Chiriquí atesora una biodiversidad asombrosa y cada vez más opciones de senderismo, circuitos de café, salidas en barco y buceo en el prístino golfo de Chiriquí. El entorno cuidadosamente mantenido de la región ofrece una escapada remota para los entusiastas de la naturaleza en lugares como el Bosque Nuboso del Monte Totumas, una reserva de 162 Ha que continuamente amplía su red de senderos. El trayecto no resulta sencillo, pero merece la pena.


El acceso está limitado a camionetas todoterreno que deben recorrer un pedregoso camino de 9 km. Al llegar, toca adentrarse en el bosque nuboso para observar aves (se han registrado más de 280 especies) y escuchar los cantos distantes de los monos aulladores. Los senderos recientemente inaugurados se extienden a lo largo de más de 30 km y son perfectos para explorar, especialmente de enero a mayo, cuando el quetzal es más visible. Otros sitios, como la Reserva Tamandúa, también ofrecen experiencias de observación de aves y circuitos especializados para fotógrafos.


Aventuras en la isla y sorbos de café. -
El Parque Nacional Marino del Golfo de Chiriquí comprende una serie de islas y manglares que se extienden a lo largo de 150 km. Un recorrido en barco es una manera encantadora de visitar las comunidades locales y descubrir sus productos, como el cacao, y se pueden ver ballenas en la travesía. Una de las islas, Bolaños, es un lugar increíble para practicar buceo en sus grandes arrecifes; por su parte, la isla de Gámez, de origen volcánico, está llena de almendros y palmeras.


De nuevo en tierra, Don Pepe Estate Coffee ofrece una mirada fascinante a uno de los principales cultivos de Chiriquí. En las estribaciones del volcán Barú, la finca brinda una introducción inmersiva al mundo del café. Produce siete variedades a pequeña escala, entre ellas el café geisha, el más caro del mundo: en Panamá, medio kilo se vende por unos 315 €. El experto y ameno guía Carlos Antonio Jurado explica todo el proceso durante el circuito, que acaba con una degustación.


A 1 h en coche de Don Pepe, el Parque Nacional del Volcán Barú brinda un estimulante desafío a los excursionistas en busca de largos y extenuantes senderos. Este imponente volcán inactivo es el punto más alto de Panamá; se eleva 3474 m y el ascenso es exigente, requiere 6-8 h y se debe ir con guía. El paisaje va presentando una fascinante transformación a medida que se avanza, y cambia de montañas húmedas a bosques bajos.


Desde la cima se ven los océanos Atlántico y Pacífico. Si la caminata se antoja demasiado, se puede optar por subir en un vehículo hasta la cima en un trayecto de 90 min. Con cualquiera de las dos opciones, la puesta de sol sobre las nubes y la observación de estrellas son inolvidables.


4
. Launceston y valle de Tamar, Australia. -
Es la segunda ciudad de Tasmania y la segunda Ciudad de la Gastronomía de Australia (junto con Bendigo, en Victoria), pero Launceston no vive a la sombra de nadie. Al borde de las fértiles llanuras volcánicas que nutren la reputación de Tasmania por sus exquisiteces, y con la principal región vinícola del estado, Launceston aúna felizmente naturaleza y alimentación: en torno a la profunda y escarpada Cataract Gorge, que llega casi al centro de la ciudad, todo gira en torno al vino y la comida.


Fermentar una reputación. -
Mientras el gigante artístico del Museum of Old and New Art (Mona) y el invernal festival cultural Dark Mofo aumentaban el atractivo de Hobart, la capital de Tasmania, Launceston, trabajaba silenciosamente en su encanto. Con una gran colección de arquitectura industrial del s. XIX y ubicado en el punto donde los ríos North y South Esk se abren camino por gargantas para convertirse en el Kanamaluka/río Tamar, "Lonnie", como la llaman los lugareños, ya contaba con numerosos destinos al aire libre para el día y restaurantes soberbios para la noche.


Y en el 2021 fue nombrada Ciudad de la Gastronomía por la Unesco, con lo que se sumaba a la selecta mesa a la que, por ahora, se sientan 50 destinos en todo el mundo. Es un reconocimiento internacional a esta pequeña ciudad de 77 000 habitantes, donde abundan los productos de calidad, los restaurantes fabulosos y las bodegas.


En el 2025, la atención se centrará aún más en la comida con la apertura del Fermentation Hub. Pensado como espacio y apoyo para empresas de fermentación de nueva creación, este centro pionero se centrará en la producción de quesos y sidra, encurtidos y cerveza, con zonas donde los visitantes podrán ver todo el proceso de fermentación de cerca.


Tentaciones por doquier. -
Ya se conduzca al norte o al sur de Launceston, en un radio de 12 km del centro se encontrará una bodega del valle de Tamar. La región vinícola más grande y antigua del estado se extiende a ambas orillas del Kanamaluka/río Tamar y acoge más de 30 viñedos unidos por la Ruta del Vino del Valle de Tamar. Uno de los enólogos pioneros, Andrew Pirie, sigue ofreciendo visitas en Apogee (solo con cita previa), y una parada en House of Arras permite conocer el que fue nombrado mejor espumoso del mundo por la revista Decanter en el 2020. Igual de famosa es Nellie, la perra staffy de Swinging Gate Vineyard, que figuró en la portada de un libro sobre perros de bodegas.


Al oeste de Launceston se halla una de las zonas agrícolas más fértiles de Australia, donde se cultivan las primeras trufas negras del país y se puede comer carne de res y verduras de primera calidad. Gran parte de estos productos llegan frescos a la ciudad los sábados por la mañana a Harvest Launceston, un mercado de agricultores en un aparcamiento con puestos de los propios productores y fabricantes.


Reglas de la naturaleza. -
A 15 min a pie de Launceston se encuentra el final del desfiladero fluvial Cataract Gorge. Bajo sus escarpadas paredes de dolerita, este cañón de 5 km se abre brevemente en First Basin, donde se ha habilitado una piscina rodeada de césped junto al río y el telesilla de un solo tramo más largo del mundo.


Hay más paisajes hermosos a 1 h en coche de la ciudad, además de mucha fauna, ciclismo de montaña y el mejor esquí de Tasmania. Bordeado de playas, el Narawntapu National Park ha sido apodado el "Serengueti de Australia" por su gran cantidad de ualabíes y otras criaturas, y pequeños pingüinos desfilan hacia la costa todas las noches cerca de la desembocadura del Kanamaluka/río Tamar, en Low Head.


La cercana George Town cuenta con la más nueva de las redes de senderos para bicicletas de montaña de Tasmania, y el Ben Lomond National Park, al sur, alberga el segundo pico más alto del estado (Legges Tor) y una sencilla estación de esquí. No siempre se puede esquiar, pero el camino que sube por la sinuosa Jacob's Ladder es uno de los más espectaculares de Australia.


5
. Valais, Suiza. -
Algunos iconos no necesitan presentación en esta región de Suiza, donde los aristócratas ingleses hicieron escala en su Grand Tour por Europa en el s. XIX y hoy las estrellas 'millennial' beben cócteles de champán en algunas de las estaciones de esquí más lujosas del mundo. Pero bajo todo el glamur se oculta un tesoro de tradición pastoral rica y atemporal, tan perdurable y firme como el impulso de la región para abrir nuevos e interesantes caminos en el 2025.


Canales rocosos, saltos en el bosque y grandes descensos. -
La estación de Verbier, en el Bajo Valais, es sinónimo de esquí (y, más recientemente, de freeride) excepcional desde la década de 1950, cuando se instaló el primero de los más de 90 remontes. Pero ahora se le ha unido una explosiva escena de ciclismo de montaña. El verano del 2025 la región acogerá el Campeonato Mundial de Ciclismo de Montaña de la UCI. La ceremonia inaugural se celebrará en la tranquila población de Sion, a 55 km de Verbier, y habrá eventos ciclistas en siete puntos de la zona.


Estos campeonatos incluirán por primera vez siete disciplinas, incluido el ciclismo de montaña eléctrico, actualmente la actividad de más rápido crecimiento en los Alpes. Con un valor de mercado actual de 5770 millones de dólares en todo el mundo, se espera que se duplique en cinco años. Al caminar por la calle principal de Verbier, Rue de Médran, en primavera, posiblemente uno se sienta fuera de lugar; tal es la cantidad de ciclistas ataviados con protecciones que se dirigen al teleférico de Médran para subir la montaña.


En Les Ruinettes, a 2200 m, los ciclistas recorren 19 km de pistas en el Verbier Bike Park, con senderos que van desde pistas suaves para principiantes hasta otras verticales que hacen volar sobre el sillín; la pista oficial de competición recibe el adecuado nombre de Tire's Fire. Además, ofrece unas vistas celestiales del Massif des Combins y del Mont Blanc. Más rutas panorámicas de todos los niveles para bicicletas eléctricas y el Verbier E-Bike Festival, que se celebrará en agosto y combinará bicis eléctricas con comida gourmet y música, son parte del plan del 2025 en el Valais para popularizar el ciclismo de montaña, e involucrar a más ciclistas jóvenes y mujeres.


Volver a los fundamentos. -
No es casualidad que el maratón del Campeonato Mundial de Ciclismo discurra por el Val d'Anniviers, un valle lateral cubierto de pinos y pueblos de cuento con graneros de madera sobre pilotes y capillas encaladas. Se trata del tranquilo yang del eufórico yin de la alta sociedad del Valais: la discreta alma patrimonial de la región donde todavía se hornea el tradicional pan de centeno en el four à pain (horno) comunitario y las familias guardan "quesos de los muertos" en el sótano para comerlos en los funerales.


Al subir a los pueblos de St Luc, Grimentz y Zinal en bicicleta eléctrica se disfruta de las curvas cerradas en un cuadro alpino aún poco conocido. Entre la embriagadora serie de picos de más de 4000 m que se alzan en el horizonte, destaca el icónico monte Cervino (Matterhorn en alemán). La Valais Alpine Bike es una nueva ruta de ciclismo de varios días, con siete etapas y 316 km por toda la región, que termina en el Val d'Anniviers.


En el camino del peregrino. -
En Martigny, la capital francófona y ciudad más antigua del Valais, se descubre rápidamente por qué los enófilos romanos se detuvieron en este punto en su ruta desde Italia por el paso del Col du Grand St Bernard. En el 2025, el centro de cría Barryland, hogar de perros San Bernardo que hasta la década de 1950 ayudaban en el rescate de alta montaña, se convertirá en un nuevo parque temático, con un plano inspirado en la huella de uno de estos animales. Se disfrutará de muchas carantoñas al pasear con un perro por Martigny en primavera, por prados de flores silvestres en Col du Grand St Bernard en verano y junto a las fabulosas orillas heladas de Champex-Lac en invierno.


6
. Giresun y Ordu, Turquía. -
Giresun y Ordu, dos ciudades vecinas y provincias homónimas en la costa turca del mar Negro, son pequeños destinos encantadores con una belleza natural en innumerables tonos de verde que espera ser descubierta. Desde sus playas únicas hasta las interminables mesetas, estas dos poblaciones rezuman encanto, exquisiteces y aire fresco. La cálida hospitalidad y la diversidad cultural de los amables lugareños aumentan el atractivo de la zona y garantizan un viaje fantástico.


Diversión en la meseta. -
En las elevadas yaylas (mesetas) de varios distritos de la provincia de Ordu tienen lugar grandes y pequeñas celebraciones estivales. En estos eventos, residentes y visitantes disfrutan de las tradiciones y la cultura regionales. Algunos duran un solo día, mientras que otros se alargan varios. De los muchos que se celebran, los más populares son los de Perşembe, Aybastı, Korgan, Düzoba y la meseta de Çambaşı, y en todos tienen una fuerte presencia la música y el baile.


Resulta difícil limitarse a observar los enérgicos movimientos de los bailarines ataviados con trajes típicos, sobre todo en los bailes más populares como el horon y el halay. Además de la música y el baile, los eventos más esperados son las peleas de lucha libre, cuando los participantes tratan de inmovilizar a sus oponentes sobre el césped mientras los espectadores animan a sus favoritos. Además, a veces también se celebran carreras de caballos en algunas fiestas de la meseta.


Excursiones por una naturaleza fabulosa. -
En torno a las ciudades de Ordu y Giresun numerosas rutas de senderismo permiten descubrir la belleza natural de la región. Los amantes de esta actividad acuden todo el año para caminar por esta zona elevada. Al ascender hacia las nubes por caminos sinuosos y bajar a valles profundos, a veces se atraviesan densos bosques y se pasa por amplias llanuras abiertas. Como la región recibe abundantes lluvias, es posible ver todos los tonos de verde, muchos tipos de vegetación y tal vez incluso un arcoíris. Las pistas de senderismo generalmente se hallan a gran altura y están cubiertas de nieve en invierno, así que es mejor acometerlas en los meses más cálidos.


Delicias culinarias. -
Las provincias de Ordu y Giresun son los centros de producción de 'fındık' (avellanas) más importantes del mundo, por lo que al hablar de exquisiteces locales inmediatamente se piensa en ellas. Las avellanas de Ordu son más grandes y magras, y las de Giresun, más pequeñas y aceitosas. Se aconseja parar en las tiendas que venden frutos secos y productos derivados. Otra comida típica de la región es la 'pide', una suerte de pizza al estilo turco elaborada en horno de piedra y preparada con ingredientes como queso, carne picada o verduras. Las pides pueden ser de todas las formas y tamaños, y siempre son deliciosas.


Por último, ya que se está en la región del mar Negro, se impone añadir 'muhlama' a la lista de delicias culinarias que probar. Este plato tradicional se elabora con kolot (queso local), mantequilla, harina de maíz y agua. Primero impresiona por su color y apetitoso aroma; luego, por las largas hebras de queso caliente y elástico; finalmente, por el inolvidable sabor que envuelve el paladar. No puede dejar la región sin haber probado este rico desayuno en algún lugar junto al mar o en las mesetas.


7
. Baviera, Alemania. -
De aspectos físicos y geográficos variados, desde bosques misteriosos a picos nevados, Baviera celebra la tradición, pero le gusta el cambio, como puede verse en sus ambiciosos objetivos de sostenibilidad. La más absoluta modernidad versus tradiciones muy arraigadas, perfección con las reglas de cálculo junto con fiesta desenfrenada en las cervecerías y reciclaje obsesivo: el Estado Libre de Baviera, su nombre oficial (Freistaat Bayern), tiene una personalidad característica, a menudo contradictoria.


También cuenta con aspectos físicos y geográficos variados, desde bosques misteriosos a picos nevados, del Múnich del s. XXI a aldeas con casas de entramado de madera. Aunque celebra la tradición, a Baviera le gusta el cambio, como puede verse en sus ambiciosos objetivos de sostenibilidad. El 2025 puede ser un buen año para visitar este ecléctico estado del sur de Alemania.


Octubre en septiembre. -
Lo que seguirá siendo igual en el 2025 (y cualquier año) es que Baviera ofrece la mejor cerveza del mundo (con permiso de checos y belgas), y que se puede saborear en algunas de las cervecerías, en salones o al aire libre, más tradicionales y con más carácter del planeta. Se espera que en el 2025 la Oktoberfest de Múnich, la fiesta de la cerveza más grande del globo, alcance o incluso supere los niveles de consumo y diversión anteriores al covid.


Esto se traduce en más de seis millones de visitantes y más de siete millones de litros de cerveza, además de cantidades industriales de comida. En el 2025, la Oktoberfest empieza el 20 de septiembre y acaba el 5 de octubre. Sí, el famoso de "octubre" comienza a mediados de septiembre para aprovechar el mejor clima y los días más largos.


Hacia arriba. -
Disfrutar del aire libre es esencial en toda visita a Baviera, y no hay mejor lugar para conocer la belleza natural de la región que en su porción de los Alpes, a lo largo de la frontera con Austria. Garmisch-Partenkirchen es la principal estación alpina de Alemania, la que cuenta con una mayor oferta todo el año y especialmente atractiva para quienes no esquían.


Destaca el ferrocarril que sube a la cima de la montaña más alta del país, el Zugspitze (2962 m), un tren que desafía la gravedad y que lleva cubriendo este trayecto aparentemente imposible casi un siglo. Si la visibilidad es buena, esta es la mejor panorámica de toda Baviera. La zona también brinda fabulosas opciones de senderismo, la más conocida de las cuales es el estrecho desfiladero de Partnach.


Locura por el fútbol. -
Alemania fue sede de la Eurocopa de fútbol en el 2024 y el Allianz Arena de Múnich acogerá la final de la Liga de Campeones de la UEFA el 31 de mayo del 2025. Es uno de los estadios más espectaculares del mundo y su exterior, envuelto en plástico, cambia de color según la ocasión.


No cabe duda de que a los bávaros les encantaría que el próximo mes de mayo la iluminación del estadio se tiñera de rojo, el color de la camiseta del Bayern de Múnich. Sería la guinda (roja) para el club más exitoso de Alemania, que en el 2025 celebrará su 125º aniversario. También está confirmada la participación del equipo en la primera Copa Mundial de Clubes de la FIFA, un evento que se celebrará en EE UU y que sin duda se retransmitirá en todos los bares y cervecerías del Estado Libre.


El futuro es verde. -
Aunque el Bayern de Múnich vista de rojo, la mayor parte de Baviera es verde, y no solo por los campos de lúpulo. La región tiene unos de los objetivos ecológicos y de sostenibilidad mejor definidos del mundo y, a diferencia de otros, cuenta con las estrategias y la investigación en curso para lograrlos. Desde la gestión de residuos hasta la contaminación acústica, pasando por el control de calidad del aire y del electrosmog, Baviera no solo habla en verde, también actúa en verde.


8
. East Anglia, Inglaterra. -
Esta enigmática región es una muestra de la vieja Inglaterra, sin los habituales ganchos turísticos. East Anglia está formada por los condados de Suffolk, Norfolk, Essex y Cambridgeshire, salpicados de pueblos con casas con entramado de madera del s. XVI y artísticas poblaciones laneras bañados por un litoral repleto de playas y reservas de aves que se llenan de avetoros en primavera. Hay lugares populares (Cambridge; los canales de Norfolk Broads), pero también otros donde formar parte del s. XXI parece opcional. Tras la visita, no se verá Inglaterra de la misma manera.


Una Inglaterra vieja y auténtica. -
Después de los atribulados principios de la década del 2020, muchos viajeros buscan poder escapar de la era moderna y East Anglia es una gran opción. El pasado impregna el paisaje del antiguo corazón del comercio lanero de Inglaterra, donde el dinero medieval erigió mansiones palaciegas, elevadas catedrales y algunas de las sedes del saber más prestigiosas del mundo. Pero no es la típica experiencia "Ye Olde English Village", sino que la historia está viva. Las artes y oficios tradicionales se protegen y la arquitectura antigua se vive y conserva. Se puede alquilar una casa que probablemente tenga fachada de entramado de madera, esté torcida y sea más antigua que muchos países modernos.


¿Por qué visitar la región en el 2025?
Porque está dejando de ser un secreto y esas centenarias casas de ensueño cada vez están más buscadas. Con Cambridge y Norwich como base para llegar a la costa de Suffolk y Norfolk, uno sentirá que el ritmo de vida se ralentiza nada más bajar del tren, una experiencia cada vez más rara en esta concurrida isla.


Festín en el este. -
East Anglia ya era ecológica, local y de temporada mucho antes de que fuera una moda. Las comidas son variadas y copiosas, como las inspiradas creaciones de Daniel Clifford en Midsummer House, Cambridge, o agradablemente sin pretensiones, como comer pescado recién llegado en los barcos y patatas fritas crujientes en las encantadoras poblaciones costeras de Aldeburgh y Southwold. Dominan los platos de mar. Gracias a los criaderos protegidos del Wash, East Anglia nunca perdió el gusto por el pescado, como ocurrió en otras regiones cuando la pesca británica disminuyó durante la II Guerra Mundial.


Las cartas abundan en ostras y mejillones, cangrejo, pescado ahumado, gambas y demás; incluso los locales de fish and chips ofrecen, además de sus opciones habituales, otras como langosta con patatas fritas y mejillones a la marinera. Los sibaritas van a Cambridge, el pueblo de Dedham, en Suffolk, la costa norte de Norfolk (donde cada pueblo tiene su propia especialidad) y a Norwich, donde el fin de semana la oferta gastronómica de St Benedicts St compite con la de Londres.


Límite oriental. -
El hecho de que la región rebose historia, no debe llevar a pensar que está anclada en el pasado. Atesora un dilatado pasado lleno de creatividad contra la ortodoxia y el sistema establecido, y de rebelión. Al fin y al cabo, es la tierra de Oliver Cromwell, que ordenó miles de asesinatos, del productor musical Brian Eno y de la reina guerrera Boudica. Pequeños teatros, centros de arte comunitarios y espacios en iglesias reconvertidas acogen desde espectáculos políticos radicales hasta artes escénicas y thrash metal, sobre todo en las estudiantiles Norwich y Cambridge, donde la mitad de los edificios parece albergar algo artístico y sorpresivo.


La música, tanto convencional como excéntrica, ocupa escenarios en festivales como Latitude y el Cambridge Folk Festival, y la alta cultura también tiene su espacio, el más famoso en el Aldeburgh Festival, fundado por un antiguo residente, el compositor Benjamin Britten. Por su parte, la escena de las artes plásticas rebosa vida en lugares como Firstsite, en Colchester, el jardín de esculturas de Houghton Hall y el Kettle's Yard de Cambridge. Hay que estar atento a los folletos y carteles que se ven por todas partes y disfrutar de la oferta.


9
. Jordan Trail, Jordania. -
Jordania es una especie de flor del desierto, un lugar de paz y estabilidad duraderas, que florece de forma improbable en una región conflictiva. Es famosa por ciudades perdidas de un pasado remoto, pero también es un buen lugar para tomar el pulso al Oriente Próximo actual. Y ahora hay otra gran razón para visitarla: en el 2025, el Jordan Trail celebrará su 10º aniversario, el momento ideal de recorrer este camino polvoriento entre olivares y silenciosos 'wadis' (valles). No hay mejor manera de explorar este fascinante país que a pie.


Un sendero diferente. -
Muy pocas personas viajan a Oriente Medio para practicar senderismo. A algunos les disuaden las asfixiantes temperaturas. A otros les desanima cargar una pesada mochila con agua potable durante áridos kilómetros. Para muchos, esta región es sinónimo de fronteras impredecibles, donde deambular libremente puede parecer inconveniente o incluso imposible. Teniendo todo esto en cuenta, la creación del Jordan Trail en el 2015 fue un acto revolucionario. Esta ruta de 676 km, que ahora celebra su primera década, cruza Jordania de arriba abajo, un viaje épico en el que los caminantes descubren capas de historia y atraviesan kilómetros de geografía diversa y asombrosa.


El sendero empieza en el norte, entre huertos y olivares, junto a la frontera con Siria; el extremo sur se encuentra en un desierto bañado por el mar Rojo. Caminar ya solo un breve tramo desvela una cara del país que la mayoría de los turistas se pierden, pues el Jordan Trail es, en esencia, un proyecto comunitario. De día pastores de la zona pueden guiar a los excursionistas, con pausas para tomar té preparado en una hoguera. Por la noche, los caminantes cansados duermen en colchones bajo las estrellas, en campamentos beduinos. La famosa hospitalidad de Jordania se disfrutará durante todo el trayecto.


Puntos destacados. -
El Jordan Trail pasa por muchos lugares imprescindibles del país, como la abrasadora extensión salina del mar Muerto (el punto seco más bajo del planeta) y los monolitos marcianos del Wadi Rum. Además de los paisajes, se verán vestigios de civilizaciones desaparecidas, como la antigua ciudad helenística de Gadara, el castillo de Ajlun, de la época de las Cruzadas, o las enormes almenas de la fortaleza de Karak.


Sin embargo, para la mayoría de los viajeros una ciudad antigua eclipsa a todas las demás: Petra. El tramo de cuatro días del Jordan Trail desde Dana a Petra es el más popular y quizá el más bonito. A pie se goza de otra perspectiva de la legendaria ciudad excavada en la roca, pues se siente el paso de los antiguos caminantes por el 'wadi' para entrar en su santuario. Esta etapa guarda muchas otras sorpresas. Quizá se oiga al íbice nubio pisar los cañones de la Reserva de la Biosfera de Dana. Se podría pasar la noche contemplando las estrellas en Feynan Ecolodge, un hermoso hotel sin conexión eléctrica, iluminado con velas, cuya azotea ofrece vistas sublimes de las constelaciones.


Seguramente uno se sentirá lejos de la civilización en el remoto Wadi Feid y sus profundos cañones, antes de, solo uno o dos días después, abrirse paso entre la multitud para entrar en Petra y contemplar cómo brilla la fachada del Monasterio en la bruma producida por el calor. Ya se detenga en Petra para explorar las tumbas talladas por los nabateos hace dos milenios o avance al sur hasta el Wadi Rum, el senderista notará que el Jordan Trail se cuenta entre las rutas de larga distancia más fabulosas del mundo. Es toda una epopeya. El único inconveniente es que se debe cargar con una mochila llena de agua potable.


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. Monte Hood y garganta del río Columbia, EE UU. -
Si para el viajero un día perfecto implica una caminata de 8 km hasta una cascada o bien una copa de vino en el balcón con vistas a un viñedo, debe visitar la región del monte Hood y no tendrá que elegir entre ambas opciones. A solo 40 min de Portland, una ciudad centrada en la gastronomía, una de las zonas geográficas más distintivas del Pacífico Noroeste, acoge una comunidad relajada donde la cocina innovadora y sostenible se está convirtiendo en un atractivo tan importante como las aventuras al aire libre por las que ya es conocido el monte Hood.


Disfrutar de la naturaleza. -
Pocos paisajes cuentan con un terreno tan diverso y a la vez son tan accesibles y gratificantes para el amante de aventuras. Esquiadores, snowboarders, excursionistas y windsurfistas conocen este secreto desde hace décadas. ¿En qué otro lugar empieza un sendero épico de 64 km alrededor de una montaña como el Timber-line Trail desde el aparcamiento de un histórico hotel de lujo? ¿O acaba una salida en kayak con una cerveza artesanal y una hamburguesa a unos pasos? Quienes acuden para disfrutar del aire libre comprueban que también es un lugar increíble para comer y beber.


Desde las arboladas laderas de la garganta del río Columbia hasta la escarpada cima del monte Hood, con frutales y bayas entre medio, esta pequeña zona atesora una variedad impresionante. Uno de los resultados es la gran cantidad de microclimas, que resultan excelentes para el cultivo de manzanas, peras, bayas y uvas. Y, tras algunos años a la sombra del más famoso valle de Willamette, se está convirtiendo en una importante región vinícola. La clave es toda esa variedad. Los diferentes microclimas permiten que prosperen muchas variedades de uvas para elaborar vino. Y donde hay buen vino siempre hay buena comida.


El Fruit Loop. -
El valle de Hood River alberga alrededor de 30 puestos agrícolas, huertos, bodegas, sidrerías y cervecerías que destacan por sus excepcionales elaboraciones a partir de la riqueza agrícola del valle, ya sea en el campo, en la copa o en el plato. Se cultivan manzanos, perales y cerezos desde la década de 1850, y más recientemente han surgido cervecerías, sidrerías y restaurantes de la granja a la mesa. El Fruit Loop, un recorrido panorámico de 56 km por caminos rurales, permite elegir lo mejor.


Se puede ir a una granja familiar como Draper Girls o Kiyokawa Family Orchards, en la aldea de Parkdale, y recolectar uno mismo los frutos que desee. O elegir un bote de mermelada de moras o una pinta de sidra sin filtrar y disfrutar de un producto hecho con fruta local. Varias bodegas ofrecen catas y luego se puede comprar la botella que más guste. En un radio de pocos kilómetros se hallarán los ingredientes para un festín que aporte fuerzas para recorrer los senderos.


Saborear la tradición. -
El salmón y la trucha hace mucho tiempo que recorren las aguas del río Columbia para desovar y son una de las fuentes de alimento más importantes del Pacífico Noroeste. Los pueblos indígenas yakama, warm springs, umatilla y nez perce los han pescado desde hace miles de años. Tradicionalmente, los pescadores se suben a andamios de madera y capturan los salmones con redes sujetas a largos postes, lo cual requiere fuerza y destreza.


Hoy los visitantes pueden comprar pescado capturado de esta manera o con métodos más modernos en la misma orilla del río; no se encontrará salmón más fresco. Hay que buscar los carteles de "Fresh Fish" cerca del Bridge of the Gods o ir al Brigham Fish Market, en Cascade Locks, regentado por dos hermanas de la Reserva Indígena de las Tribus Confederadas de Umatilla.

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