SU PESCA.- Ante todo decir que los cangrejos de río autóctonos están protegidos por la ley puesto que están en peligro de extinción. Explicaré como los pescábamos en nuestros ríos, charcas e incluso acequias y siempre al atardecer.
La forma de capturarlos según la ley era con reteles a los que se les ponía cebo, que conseguíamos de los despojos de las carnicerías. Generalmente solíamos ponerle bazo de cualquier res, aunque podía valer cualquier tipo de carne, cuanto más putrefacta mejor, más olería y más éxito tendríamos de capturarlos.
El equipo a usar es el retel, también denominado lamparilla, garapanda y garramincho, es un arte de pesca para la captura de cangrejos de río (cangrejos de agua dulce). Consiste en un aro de metal con una red en su interior, que puede tener forma de bolsa, donde se coloca el cebo para atraer a los cangrejos que quedarán atrapados en dicha red. El término proviene del catalán y del aragonés 'retel' y este del latín retellum, de rete, red.
El retel es el único arte o aparejo autorizado para la pesca del cangrejo de río. Se limita su captura, según las zonas, dependiendo de la época de reproducción y cría, abundancia y coincidencia con otras actividades. También se establece el número máximo de reteles por pescador -que pueden rondar los ocho o diez- así como la longitud máxima de orilla donde pueden ir colocados -que ronda los 100 metros- estableciéndose límites y separaciones con otros pescadores.
El retel básico es un arte que consiste en un aro de metal con una red más o menos profunda y un peso metálico en el centro. El retel de dos aros es más eficiente y evita la pérdida de cangrejos en su retirada del agua. Existen reteles con más aros y bocas de entrada que se aproximan más a la estructura de las nasas y que, dependiendo de las zonas de pesca, pueden están prohibidos. Esta provisto de una larga cuerda para poder atarlo a la orilla y no perderle, también lleva en el fondo un plomo con un imperdible (el plomo para que se hunda hasta el fondo del río y el imperdible para poder sujetar el cebo en el fondo del retel y no se lo puedan llevar los cangrejos).
El cebo, habitualmente trozos de vísceras con fuerte olor (bazo, hígado, pulmón) de distintos animales domésticos, se coloca en el centro de la red, atado o o enganchado para que no se pierda durante el manejo y colocación.
Una vez acabada la tarea de colocación del cebo el retel se sumerge en la zona elegida utilizando una pértiga acabada en horquilla por donde corre el cordaje que sujeta el aro exterior. El cordaje quedará localizado y accesible en la orilla para, una vez pasado el tiempo necesario y cuando se considere oportuno o se observen los cangrejos en el retel, sacar del río con ayuda de la pértiga el retel, procurando que el cordaje no se enganche en las piedras y ramas de la orilla ni vuelque ocasionando la pérdida de las capturas. Se devolverán al río las capturas que no lleguen a la talla permitida.
Para que permanezcan vivos y en buenas condiciones los cangrejos se deben guardar en pequeñas talegas, fardeles, sacos de tela, cestas de mimbre u otros recipientes siempre bien aireados y cerrados para evitar la fuga y el deterioro de la pesca. Los recipientes de plástico deben evitarse. Hasta su consumo deben permanecer a la sombra y en lugar fresco.
La forma de capturarlos según la ley era con reteles a los que se les ponía cebo, que conseguíamos de los despojos de las carnicerías. Generalmente solíamos ponerle bazo de cualquier res, aunque podía valer cualquier tipo de carne, cuanto más putrefacta mejor, más olería y más éxito tendríamos de capturarlos.
El equipo a usar es el retel, también denominado lamparilla, garapanda y garramincho, es un arte de pesca para la captura de cangrejos de río (cangrejos de agua dulce). Consiste en un aro de metal con una red en su interior, que puede tener forma de bolsa, donde se coloca el cebo para atraer a los cangrejos que quedarán atrapados en dicha red. El término proviene del catalán y del aragonés 'retel' y este del latín retellum, de rete, red.
El retel es el único arte o aparejo autorizado para la pesca del cangrejo de río. Se limita su captura, según las zonas, dependiendo de la época de reproducción y cría, abundancia y coincidencia con otras actividades. También se establece el número máximo de reteles por pescador -que pueden rondar los ocho o diez- así como la longitud máxima de orilla donde pueden ir colocados -que ronda los 100 metros- estableciéndose límites y separaciones con otros pescadores.
El retel básico es un arte que consiste en un aro de metal con una red más o menos profunda y un peso metálico en el centro. El retel de dos aros es más eficiente y evita la pérdida de cangrejos en su retirada del agua. Existen reteles con más aros y bocas de entrada que se aproximan más a la estructura de las nasas y que, dependiendo de las zonas de pesca, pueden están prohibidos. Esta provisto de una larga cuerda para poder atarlo a la orilla y no perderle, también lleva en el fondo un plomo con un imperdible (el plomo para que se hunda hasta el fondo del río y el imperdible para poder sujetar el cebo en el fondo del retel y no se lo puedan llevar los cangrejos).
El cebo, habitualmente trozos de vísceras con fuerte olor (bazo, hígado, pulmón) de distintos animales domésticos, se coloca en el centro de la red, atado o o enganchado para que no se pierda durante el manejo y colocación.
Una vez acabada la tarea de colocación del cebo el retel se sumerge en la zona elegida utilizando una pértiga acabada en horquilla por donde corre el cordaje que sujeta el aro exterior. El cordaje quedará localizado y accesible en la orilla para, una vez pasado el tiempo necesario y cuando se considere oportuno o se observen los cangrejos en el retel, sacar del río con ayuda de la pértiga el retel, procurando que el cordaje no se enganche en las piedras y ramas de la orilla ni vuelque ocasionando la pérdida de las capturas. Se devolverán al río las capturas que no lleguen a la talla permitida.
Para que permanezcan vivos y en buenas condiciones los cangrejos se deben guardar en pequeñas talegas, fardeles, sacos de tela, cestas de mimbre u otros recipientes siempre bien aireados y cerrados para evitar la fuga y el deterioro de la pesca. Los recipientes de plástico deben evitarse. Hasta su consumo deben permanecer a la sombra y en lugar fresco.
RESUMEN.
1º - Reúne tus materiales de pesca. La carnada puede ser cualquier tipo de carne cortada en pedazos pequeños. Los perritos calientes y el tocino son los favoritos. En su forma más simple, la pesca de cangrejos de río puede ser hecha con un pedazo de carnada atado al largo de un hilo. Pero para capturar cantidades más grandes, una red de mano de mango largo o una trampa funcionan mejor.
2º - Encuentra un agujero de pesca. Los cangrejos de río se encuentran a lo largo de Estados Unidos en estanques, lagos, corrientes y ríos. Los cangrejos son más activos de noche, así que es mejor pescarlos en la tarde noche o en la noche.
3º - Coloca el cebo en la línea, red o trampa y tírala al agua. Deja la carnada quieta por treinta minutos. Cuando tires de la línea, red o trampa, los cangrejos de río también saldrán.
4º - Recoge los cangrejos de río de la red o trampa y colócalos en una bolsa de arpillera humedecida u otro contenedor con una toalla húmeda. Esto mantendrá a los cangrejos de río vivos y frescos hasta que estés listo para cocinarlos y comerlos.
1º - Reúne tus materiales de pesca. La carnada puede ser cualquier tipo de carne cortada en pedazos pequeños. Los perritos calientes y el tocino son los favoritos. En su forma más simple, la pesca de cangrejos de río puede ser hecha con un pedazo de carnada atado al largo de un hilo. Pero para capturar cantidades más grandes, una red de mano de mango largo o una trampa funcionan mejor.
2º - Encuentra un agujero de pesca. Los cangrejos de río se encuentran a lo largo de Estados Unidos en estanques, lagos, corrientes y ríos. Los cangrejos son más activos de noche, así que es mejor pescarlos en la tarde noche o en la noche.
3º - Coloca el cebo en la línea, red o trampa y tírala al agua. Deja la carnada quieta por treinta minutos. Cuando tires de la línea, red o trampa, los cangrejos de río también saldrán.
4º - Recoge los cangrejos de río de la red o trampa y colócalos en una bolsa de arpillera humedecida u otro contenedor con una toalla húmeda. Esto mantendrá a los cangrejos de río vivos y frescos hasta que estés listo para cocinarlos y comerlos.
Y para acabar con el articulo de la pesca del cangrejo de rió, os indicare como hacer una trampa a partir de dos botellas plásticas de dos litros, para coger cangrejos de río muy utilizados en programas de supervivencia.
1º Corta la primera botella justo por la mitad de su longitud.
2º Corta la segunda botella unas cuantas pulgadas más arriba que la primera.
3º Desenrosca la tapa de la segunda botella y coloca la más pequeña de las dos partes de arriba de las botellas dentro de la más grande.
4º Perfora 5 agujeros a lo largo de la parte inferior de estas dos partes de las botellas con un taladro eléctrico, con estas dos partes de los recipientes unidos.
5º Perfora otros 5 agujeros, aproximadamente un centímetro más arriba de los primeros 5 que hiciste inicialmente (Estos orificios son para las bridas de plástico).
6º Introduce una brida de plástico por uno de los orificios de la parte inferior.
7º Introduce esa misma brida de plástico por el orificio que abriste por encima de ese primer agujero y abróchala hasta dejarla bien apretada.
8º Repite los pasos 6 y 7 con los otros agujeros.
9º Una vez estén bien apretadas todas las bridas de plástico, corta la longitud sobrante.
10º Coloca un peso en la parte inferior de las botellas (Si lo que buscas es atrapar cangrejos de río en lugar de pescado).
11º También coloca un peso en la parte de arriba de las botellas.
12º Haz otro agujero en la parte de abajo de la trampa.
13º En ese agujero amarra una pesa de plomo para pesca con una brida de plástico pequeña.
14º Desenrosca la tapa de la parte de arriba de las botellas, y coloca un pedazo de salchicha o tocino el cual te va a servir como cebo.
15º Enrosca de nuevo la tapa en la botella.
16º Ata una cuerda debajo de la tapa.
17º Lanza la trampa hacia el agua unos cuantos metros y déjala en ese sitio durante el día y la noche.
18º Cuando vuelvas al otro día encontrarás unos cuantos cangrejos de río en la trampa.
Esta trampa funciona porque los cangrejos sienten el olor a comida y trepan a través de orificio de la tapa que está en la parte de abajo de la trampa. Cuando quieren salir, no encuentran la forma de trepar de nuevo al orificio de la tapa por donde entraron, debido al ángulo en que están las botellas. Además, los cangrejos estarán distraídos con el cebo hasta que revises la trampa.
2º Corta la segunda botella unas cuantas pulgadas más arriba que la primera.
3º Desenrosca la tapa de la segunda botella y coloca la más pequeña de las dos partes de arriba de las botellas dentro de la más grande.
4º Perfora 5 agujeros a lo largo de la parte inferior de estas dos partes de las botellas con un taladro eléctrico, con estas dos partes de los recipientes unidos.
5º Perfora otros 5 agujeros, aproximadamente un centímetro más arriba de los primeros 5 que hiciste inicialmente (Estos orificios son para las bridas de plástico).
6º Introduce una brida de plástico por uno de los orificios de la parte inferior.
7º Introduce esa misma brida de plástico por el orificio que abriste por encima de ese primer agujero y abróchala hasta dejarla bien apretada.
8º Repite los pasos 6 y 7 con los otros agujeros.
9º Una vez estén bien apretadas todas las bridas de plástico, corta la longitud sobrante.
10º Coloca un peso en la parte inferior de las botellas (Si lo que buscas es atrapar cangrejos de río en lugar de pescado).
11º También coloca un peso en la parte de arriba de las botellas.
12º Haz otro agujero en la parte de abajo de la trampa.
13º En ese agujero amarra una pesa de plomo para pesca con una brida de plástico pequeña.
14º Desenrosca la tapa de la parte de arriba de las botellas, y coloca un pedazo de salchicha o tocino el cual te va a servir como cebo.
15º Enrosca de nuevo la tapa en la botella.
16º Ata una cuerda debajo de la tapa.
17º Lanza la trampa hacia el agua unos cuantos metros y déjala en ese sitio durante el día y la noche.
18º Cuando vuelvas al otro día encontrarás unos cuantos cangrejos de río en la trampa.
Esta trampa funciona porque los cangrejos sienten el olor a comida y trepan a través de orificio de la tapa que está en la parte de abajo de la trampa. Cuando quieren salir, no encuentran la forma de trepar de nuevo al orificio de la tapa por donde entraron, debido al ángulo en que están las botellas. Además, los cangrejos estarán distraídos con el cebo hasta que revises la trampa.
0 comentarios:
Publicar un comentario